LO QUE DEBES SABER…
  • Acero inoxidable: no todos los aceros inoxidables son iguales, unos aguantan mejor el agua o la humedad que otros, por lo que deberemos elegir nuestra pieza con cuidado.
  • Preparación: eliminaremos golpes y desperfectos de la superficie de acero para que el acabado sea mejor.
  • Imprimación: habrá que aplicar una imprimación especial para acero inoxidable antes de dar la pintura.

 

Lo primero que tendremos que hacer será eliminar cualquier desperfecto o golpe que tenga la pieza de acero.

Preparar la pieza de acero

Para dejar la superficie preparada antes de pintarla, podemos utilizar una pequeña lima y luego repasarla con una lija de grano fino. Incluso, si observamos un golpe más grande, nos podemos ayudar de un pequeño martillo de joyero sobre un tornillo de banco o alguna superficie dura en la que podamos apoyarnos y eliminar el golpe.

Si la superficie está muy pulida, puede suceder que la pintura no agarre bien, por lo que un buen consejo es frotar con papel de lija fino haciendo pequeños círculos para dejar un acabado más mate que nos facilitará el agarre del recubrimiento. A continuación, limpiaremos todo con un disolvente y un paño fino para eliminar todos los restos de grasa y polvo, y ya dejaremos la pieza lista para la fase de la pintura.

Imprimación y pintura para acero inoxidable

Una vez limpia y seca la pieza de acero, taparemos las zonas contiguas que no queremos pintar con cinta de carrocero o con periódicos. Aplicaremos primero una imprimación especial para aceros inoxidables que nos dejará una base perfecta y evitará que el material se pique o se levante la pintura con el paso del tiempo.

Tras esperar 4-5 horas (o el tiempo indicado por el fabricante), ya podremos aplicar la pintura, también especial para acero. Si es preciso, daremos una segunda mano, siempre esperando entre capa y capa de 2 a 3 horas como mínimo.

Ya tendremos pintada nuestra pieza de acero inoxidable de la manera más fácil y con un acabado digno de un profesional.