Cuando hablamos de animales domésticos, no solo tenemos que referirnos a perros y gatos; cada vez es más común ver en los hogares una amplia variedad de especies con quien compartir la vida. Una tortuga de agua es un buen ejemplo.

Las tortugas son animales delicados que, como cualquier otro, necesitarán nuestro tiempo y esfuerzo, sobre todo a la hora de cuidar su higiene, ya que se trata de animales que ensucian bastante con sus desechos.

Pueden vivir de 10 a 20 años y tener un caparazón de hasta 30 cm. Su nombre científico es Graptemys sp o Pseudemys sp.

¿Dónde deben vivir?

Estas tortugas tienen sangre fría, por lo que su hábitat debe ser lo más parecido al que tendrían en libertad, es decir deberán poder sumergirse en el agua, pero a su vez tener una zona seca donde descansar y poder secar su caparazón.

Se pueden utilizar dos zonas:

Tortugueras

Tienen una zona de agua, pero a su vez, dispondrá de una pequeña rampa donde la tortuga podrá acceder a una zona seca para así secarse y regular su temperatura corporal.

Además, es importante que tenga accesorios, como alguna sombra en caso de que el sol le dé directamente.

Deberíamos saber que:

  • Para saber cuánta agua debe tener, hay que pensar que para que pueda nadar, necesita dos o tres veces su tamaño si ponemos la tortuguera en vertical, y siempre ha de tener una rampa para que pueda salir a descansar, ya que no puede pasarse todo el día nadando.

La zona de agua deberá, por tanto, ser más grande que la zona seca, ya que, en ella, pasarán más horas.

  • Deberá mantenerse la temperatura en torno a 20-30 ºC.
  • Podremos poner como accesorios arena o gravilla para que puedan excavar y llegar a esconderse.
  • Otros accesorios muy prácticos son los termómetros para controlar la temperatura, los filtros para limpiar el agua y también lámparas en el caso de que no puedan tomar el sol de manera natural.

Cuando hablamos de tortugueras, es importante no caer en el error de ponerla cerca de la calefacción pensando que la tortuga tiene frío. Del mismo modo, en verano hay que evitar las corrientes de aire o zonas muy frías con aires acondicionados.

Jardín o estanque

Se trata de un espacio más amplio que una tortuguera y en el que la tortuga tendrá acceso al agua (normalmente más cantidad y profundidad) e igualmente dispondrá de una zona seca donde reposar.

Suelen integrarse en viviendas con una zona exterior propia, en parques, centros de animales, etc.

¿Cómo se limpia la Tortuguera?

En el caso de que sea pequeña, podemos cambiar el agua por completo 2 veces por semana, pero además debemos limpiar bien los accesorios para evitar que queden bacterias entre las piedras, sombrillas u otros elementos de decoración.

Si son grandes, debemos realizar la limpieza cada menos tiempo, en función de la suciedad del agua y de si disponemos o no de sistemas de filtración para mantenimiento del agua limpia.

¿Qué deben comer y cada cuánto?

Aunque son animales omnívoros, en el mercado existen dietas equilibradas a base de sticks o pellets que son muy completos para cubrir sus necesidades.

Se deben evitar las gambas pequeñas como dieta principal, ya que darán lugar a problemas como hipovitaminosis a largo plazo.

También pueden alimentarse de verduras como la lechuga y otras plantas que de manera fisiológica comerían en su hábitat habitual.

Se deben alimentar dos veces al día con este tipo de piensos para tortugas; una vez deje de comer lo que tiene en la superficie, debemos considerar que se trata de alimento que le sobrará y lo óptimo es retirarlo, ya que lo único que hará, será ensuciar el espacio.

También es bueno poner una piedra de calcio en el agua, ya que favorecerá a que no aparezcan patologías asociadas a la hipocalcemia.

Las tortugas de agua, por tanto, son animales que, como cualquier otro requiere tiempo y esfuerzo. Si existe alguna alteración en su vida habitual, deberán acudir al veterinario como cualquier otra mascota.

Recuerda que MAPFRE cuenta con un Seguro para Animales Exóticos, que incluye servicio de orientación veterinaria y consulta sobre animales.