Las aves también tienen parásitos. Los más frecuentes son los coccidios, del género Isospora y Eimeria. Apreciarlos a simple vista no es sencillo, ya que no se ven como pequeñas lombrices que puedan llamar nuestra atención, sino que los huevos solamente se ven con un microscopio. Por eso, es importante conocer sus síntomas más frecuentes para poder darnos cuenta de que algo sucede en nuestro pájaro y actuar con un tratamiento adecuado.

Síntomas de coccidios

Los síntomas no tienen por qué ser muy evidentes, es más, en ocasiones, se pueden confundir con otras enfermedades. Es importante observar si solo le ocurre a uno de nuestros pájaros, o, si por el contrario, afecta al resto de habitantes de una misma jaula, ya que puede darse el caso de que se lo estén transmitiendo unos a otros.

En algunos casos, podemos observar:

  • Heces pegadas en la zona de la cloaca. A veces son más blandas y hacen que el propio animal se manche.
  • Delgadez: estos parásitos afectan a las vellosidades del intestino, por lo que al destruirlas, la función de absorber el alimento no se hará de la manera correcta, y podemos ver que los pájaros están más delgados.
  • Diarreas.

¿Cómo se transmite y cómo prevenirlo?

Los huevos de los coccidios son muy resistentes a la temperatura ambiente, por lo que es fácil que unos canarios en la misma jaula se contagien.

Para prevenirlo es importante tomar medidas como:

  • Maximizar la higiene de la jaula: si sabemos que tenemos este parásito, habrá que limpiarla y desinfectarla casi a diario.
  • Evitar aviarios muy grandes, ya sea de canarios o de otras aves.
  • En caso de introducir nuevos miembros, debemos desparasitarles para evitar riesgos innecesarios.
  • Poner tratamiento a nuestra mascota en cuanto tengamos confirmada la enfermedad, separando a ese pájaro del resto.

¿Cuál es el tratamiento?

Una vez que tengamos sospecha de que nuestro pájaro tiene parásitos, lo ideal es llevarlo al veterinario. Si no es posible llevar al animal, podremos trasladar una muestra de heces para que en la clínica procedan a su análisis.

Con la ayuda de un microscopio podremos apreciar si tiene o no huevos de coccidio, siendo las especies más frecuentes en aves Isospora e Eimeria.

El tratamiento para estos parásitos son las sulfamidas, un tipo de antibiótico que se dará en función del peso y de cómo sea el ave en cuestión. Es recomendable que darle al animal durante unos días un probiótico, para el volver a recuperar el estado que tenía inicialmente su intestino.

Para asegurarnos de que se trata de coccidios, es importante que observemos bien cualquier sintomatología como las mencionadas anteriormente de pérdida de peso o diarrea, y de este modo, acudir a un veterinario para que pueda ofrecernos una solución efectiva al posible problema que tenga en animal.