Mientras que las gatas alcanzan la madurez sexual aproximadamente a los seis meses, los gatos machos tardan algo más, hasta el año no suelen estar preparados para ello. Lo ideal es aparearlos cuando han llegado al año, de esa manera nos aseguraremos de que ya están bien introducidos en casa, se sienten bien y la madurez sexual se ha alcanzado.
Cómo aparear gatos
Para lograr aparear a tus gatos y tener gatitos, será necesario que conozcas bien la naturaleza de tu mascota y cuándo es el momento ideal para ello. Antes de plantearte cruzar a tu gato con otro, debes tener en cuenta los ciclos sexuales de estos animales, mientras que los gatos macho siempre están dispuestos a aparearse en cualquier momento, las hembras no y deberás esperar a que estén en celo para lograr un embarazo.
La hembra debe estar en celo
Como hemos señalado anteriormente, es muy importante que la hembra esté en celo para que pueda producirse el apareamiento. Así que lo primero que deberás hacer es saber cómo distinguir los signos que indican que tu gata se encuentra en este momento.
Observa a tu mascota y comprueba si presenta alguno de estos comportamientos: ¿está mucho más mimosa que de costumbre?, ¿se roza contigo?, ¿orina fuera de su caja de arena o levanta la pelvis y la cola?
Aceptación de la pareja
Para los gatos es tremendamente importante la pareja con la que se aparean, así que esta deberá ser del agrado de la hembra. De nuevo entra en juego la observación, si esta acepta al macho.
Así podremos ver que si le acepta el macho le morderá el cuello y comenzará la monta. Poco después, la hembra le rechazará con un sonoro maullido, así que tendremos que esperar unos minutos para que el gato vuelva a intentarlo y finalmente la gata acepte.
Para que el cruce se produzca en las condiciones óptimas, es preferible que se haga en casa de la gata para que ella se encuentre mucho más cómoda, en el caso de que no conozca al macho.
Qué ocurre tras el apareamiento
Una vez que este se haya producido, debes tener en cuenta una serie de comportamientos normales de los gatos y anticiparte a ellos. En primer lugar, tras el encuentro, el macho necesitará un lugar para escapar de la hembra ya que en muchas ocasiones esta actúa de forma agresiva. Generalmente lanzará un maullido muy sonoro, pero ten en cuenta que es normal.
Además, las gatas se asearán durante más de una hora tras haberse producido el apareamiento con el macho. En estos momentos, es mejor que no te acerques a ella ya que no te lo permitirá. Tras ello, su comportamiento volverá a ser el de siempre.
Cuándo se produce la ovulación
Si quieres lograr que tus gatos se apareen con éxito debes tener en cuenta los ciclos de ovulación de tu mascota. Debes saber que las gatas ovulan una vez que se ha producido el cruce, por lo que, si quieres garantizar el embarazo, tendrás más posibilidades si se producen más encuentros entre la pareja.
Cómo saber si está embarazada
Si todo ha salido correctamente tu gata estará embarazada y deberás conocer los síntomas que su nuevo estado presenta. No es posible saber si está en cinta hasta pasados varios días y debe hacerse mediante una prueba de ultrasonidos que no será fiable hasta los 20 días de gestación.
No obstante, a partir de este momento podrás empezar a notar los síntomas en tu gata ya que esta puede presentar nauseas matutinas, sobre todo en la tercera y cuarta semana del embarazo.
Por otro lado, a partir del día 35, el cuerpo de la madre comenzará a cambiar y a adaptarse a la lactancia, así sus pezones se volverán rosados y su tripa aumentará de tamaño. El ciclo normal de embarazo de los gatos es de 60 a 63 días, por lo que te será fácil calcular cuando van a llegar los gatitos si conoces cuando tuvo lugar el apareamiento.
No obstante, es conveniente que lleves a tu gata al veterinario para que pueda llevar un control. Infórmate de los seguros para mascotas MAPFRE y cuida de aquello que más te importa.
El momento del parto
Tras la llegada a término del embarazo transcurrido el tiempo de gestación, la gata ya estará preparada para dar a luz a sus gatitos. Deberás estar preparado para poder ayudarla en el parto proporcionándole un lugar adecuado para ello. Este debe estar oscuro y tranquilo.
Normalmente buscarán soledad, pero es conveniente que prepares un sitio en el que se sienta cómoda ya que necesitarán acceso a comida, agua y a su caja de arena. Además, deberás colocar una caja que cuente con tejido mullido y que esté caliente para que pueda colocar en ella a sus crías. Prepara un lugar en el que puedan caber todos, ya que las camadas suelen ser de 4 a 6 gatitos.
¿Qué pasa si no has conseguido que se aparee?
Es posible que no se logre un apareamiento a la primera y que este no conlleve un embarazo. No te preocupes, lo primero es que tu gata se encuentre cómoda con su pareja y que la acepte para poder lograr que se quede embarazada. Si no lo hace durante el primer celo, podrás volver a intentarlo unos días después ya que las hembras vuelven a ser fértiles una semana después.