La levadura de repostería es un emulsionante que, al entrar en contacto con un líquido o al someterse al calor, desprende un gas (dióxido de carbono) que hace que las masas suban y se esponjen. Es un ingrediente básico en la elaboración de magdalenas, cupcakes, bizcochos, etc., pero no imprescindible.

Por suerte, existen sustitutos de la levadura que, aunque no consiguen que el producto terminado sea exactamente igual (la miga es más gruesa, está menos esponjoso y sube un poco menos), al menos, cumplen la misma función con bastante decencia. Estos son algunos de los sustitutos de la levadura que puedes usar en tus recetas:

Bicarbonato sódico

El bicarbonato sódico es un compuesto químico que se activa con un líquido y un ingrediente ácido (puede ser limón, vinagre, suero de la mantequilla, yogur natural, etc.). Cuando se mete en el horno, el calor hace que se descomponga en dióxido de carbono y esponje la masa.

El resultado es una masa que no sale tan dorada del horno y que presenta unos agujeros de aire más grandes que si se hubiera usado levadura. Pero el sabor es el mismo.

  • ¿Cómo usarlo?

Por cada 120 gramos de harina hay que echar ¼ de una cucharita pequeña de bicarbonato de sodio más un ácido (por ejemplo, 17 mililitros de zumo de limón).

Cremor tártaro

Es un ácido seco que se encuentra de forma natural en plantas, pero también en el mundo del vino, ya que es el residuo que se forma en el fondo de los barriles tras la fermentación de la uva.

Para que funcione como levadura, hay que usarlo conjuntamente con bicarbonato y maicena. El resultado es similar al del bicarbonato, pero hay que tener en cuenta que, una vez añadido a la receta, su acción es inmediata, por lo que conviene meterlo al horno rápidamente para que no pierda propiedades.

  • ¿Cómo usarlo?

Mezcla 100 gramos de cremor tártaro, 70 gramos de bicarbonato y 30 gramos de maicena, y guárdalo en un tarro de cristal hermético, ya que te servirá para varios usos.

Para utilizarlo en la receta, necesitas 7 gramos de esta mezcla por cada 125 gramos de harina.

Claras de huevo

Cuando se baten los huevos, las proteínas presentes en ellos se desnaturalizan, es decir, forman una red llena de aire. Al meter la receta en el horno, dicha red se expande haciendo que el pastel se eleve.

Una vez horneado, el pastel es menos denso, más seco y tiene una textura muy fina, pero no altera el sabor. Es conveniente no usar este sustituto de la levadura en recetas con exceso de aceite o mantequilla, ya que las grasas apelmazan la masa.

  • ¿Cómo usarlo?

Se utilizan tres o cuatro claras de huevo batidas a punto de nieve hasta que tripliquen su volumen. Después, se agrega el resto de los ingredientes y se mete rápidamente en el horno para que no pierda aire.

Harina leudante

Se trata de un tipo de harina refinada que incluye un agente leudante, es decir, una sustancia que, por el efecto del calor, es capaz de producir gases haciendo que el producto aumente su volumen.

Es el resultado más perfecto, pues no deja de ser una harina que ya tiene incorporada la levadura.

  • ¿Cómo usarlo?

Solo hay que sustituir la misma cantidad de harina de la receta por este tipo de harina.

¿Y para hacer pan?

Fuente: https://bit.ly/2LLqbZy

Si lo que quieres es una levadura casera para elaborar pan, las opciones anteriores no sirven, ya que pierden su poder si no se hornean rápidamente y la masa del pan requiere de una fermentación previa.

Para este caso, se puede recurrir a una de estas alternativas:

Harina, agua y miel

Si no se tiene levadura para pan, lo mejor es elaborar una masa madre casera con harina, agua y miel de abeja. Hay que mezclar los ingredientes y dejarlos reposar durante once días para que se forme una microflora con las mismas características que la levadura. El resultado es inmejorable, pero requiere tener mucha paciencia.

Cerveza artesana

La cerveza contiene microorganismos vivos como la levadura, por lo que también es una alternativa excelente para elaborar pan. Eso sí, para que tenga esos microorganismos debe estar sin pasteurizar, ya que ese proceso elimina cualquier forma de vida.

Este tipo de cervezas se pueden reconocer porque en el fondo de la botella puede verse una densa nube de posos, como ocurre en las cervezas artesanas.

  • Solo tienes que mezclar 100 mililitros de cerveza.
  • Una cucharada de harina.
  • Una cucharita pequeña de azúcar.
  • Después, guarda la mezcla en un bol, tápala con papel film y deja que repose durante toda la noche.

Esta cantidad equivale a 25 gramos de levadura fresca.

Patata

Sí, las patatas también pueden ayudarte a hacer que tu pan crezca sin necesidad de usar levadura, ya que se trata de un carbohidrato simple que ayuda a que la fermentación se produzca.

  • Mete la ralladura de dos patatas en un frasco de cristal con capacidad para 500 mililitros.
  • Añade una cucharada de sal, dos de azúcar, una taza de agua caliente y tapa el frasco.
  • Deja que fermente durante cinco días.

Para usarlo en tus recetas debes incorporar 200 gramos de esta masa por cada 600 de harina.

Con estos trucos, puedes preparar tus recetas fácilmente, aunque no tengas levadura en casa. Además, con tu Seguro de Hogar MAPFRE lo tienes fácil, porque cubre hasta dos reparaciones al año para arreglar cualquier avería que se produzca en tu horno. Así, nada ni nadie podrá frenar tu afición por la repostería y la panadería.