Los calamares son fuente de proteínas y vitaminas; además son bajos en grasa e ideales para toda la familia. Una de sus grandes ventajas es que podemos cocinarlos de muchas maneras y utilizarlos para enriquecer platos de pescado y marisco, arroces…etc. En el mercado podemos encontrarlos de muchas formas, algunos ya vienen limpios y troceados, listos para consumir, pero suelen ser productos congelados.

Si quieres disfrutar de calamares frescos para cocinar es probable que tengas que eviscerarlos tú mismo. Puede que parezca una tarea complicada, pero te aseguramos que si sigues estos pasos limpiar calamares será muy sencillo.

Cómo limpiar calamares paso a paso

Si quieres comprar calamares frescos es muy probable que estos requieran limpieza ya que, normalmente, en las pescaderías no se realiza esta tarea. Si te decantas por productos congelados o precocinados, estos estarán listos para cocinarlos sin tener que limpiarlos previamente.

A continuación, te contamos cuáles son los pasos que debes seguir para limpiar calamares, algo que te servirá para ahorrar y conseguir un producto más fresco y natural que sin duda enriquecerá tus platos.

  1. Sujeta el cuerpo del calamar con una mano, firmemente y con la otra tira de la cabeza y los tentáculos en dirección contraria. De esta manera conseguiremos separar ambas partes fácilmente.
  2. A continuación, realiza un corte justo por encima de los ojos del calamar. Quédate con los tentáculos y tira las tripas.
  3. Si quieres conservar la tinta, separa la bolsa en la que se encuentra de las tripas y guárdala con cuidado para que no se rompa.
  4. Revisa la base de los tentáculos para comprobar que la boca del calamar ha sido cortada junto con las tripas. Si no es así, elimínala y tírala.
  5. Para quitar las aletas del calamar, deberás tirar hacia afuera de cada una de ellas. Después, retira la piel de cada una de ellas y resérvalas.
  6. Quita la piel del calamar y extrae la parte dura y transparente en forma de pluma que encontrarás en su interior.
  7. Dale la vuelta al cuerpo y enjuaga con abundante agua bajo el grifo para eliminar todos los restos que hayan podido quedar. Si aún permanece algo pegado a la pared, elimínalo para que quede completamente limpio.
  8. Elimina la tira dura pegada a las aletas del calamar realizando un corte con un cuchillo.
  9. Elimina los restos de agua con un paño seco y cocínalos al gusto.

Tras esto, el calamar estará listo para consumir y ser preparado en cualquier receta. Como ves conseguir la limpieza adecuada es bastante sencillo, tan solo es necesario conocer cómo debe realizarse correctamente.  A continuación, te mostramos un vídeo en el que podrás ver paso a paso cómo se realiza la operación.

 

También te ofrecemos algunas recetas interesantes para que puedas disfrutar de este alimento tan nutritivo y fácil de preparar. Recuerda que comer de manera variada es esencial para tener una dieta equilibrada.