En primer lugar, deberás evaluar el estado de la superficie. Comprueba sobre qué material vas a trabajar y la profundidad de la grieta. Esto te dará pistas para saber cómo debes actuar.

Preparación

Con la ayuda de una espátula agranda un poco la grieta para que penetre bien el material. Utiliza un cepillo para eliminar los restos de suciedad que hayan podido quedar dentro de la grieta para ayudar a que el material que vas a usar se fije mejor.

Material

Para reparar grietas en el techo no demasiado anchas puedes usar una masilla tapagrietas que encontrarás en botes o en envases con un aplicador en tiendas de bricolaje. Sigue las instrucciones del producto para conseguir un resultado perfecto. En el caso de grietas más grandes, superiores a los 10 centímetros, lo más adecuado es usar masilla universal.

Aplicación

Una vez te has asegurado que todo está limpio usa una espátula para introducir y rellenar de material la grieta. Si el envase tiene aplicador, rellena la grieta y después usa la espátula para alisar y retirar el material sobrante. Al terminar deja secar el tiempo que indique el fabricante en el envase.

Acabado

Lija toda la superficie sobre la que has trabajado. Hazlo lentamente y hasta que lo dejes bien liso y suave. En ese momento ya podrás pintar la superficie dañada.

Otros materiales

Las tiendas de bricolaje ofrecen soluciones avanzadas. Es el caso de las masillas. Antes se solía utilizar yeso. Esta es una opción algo más económica que conviene que contemples. También es posible fabricar una masilla casera con cemento blanco y agua. Procura que la masa sea consistente y uniforme y, sobre todo, que no deje grumos.

Reparar grietas en el techo es sencillo si estas son pequeñas y no están causadas por un defecto en la construcción del edificio o alguna circunstancia similar. Asegúrate bien antes de trabajar en la grieta que no es así. Si se da el caso, deberás reclamar y puede que tengas que batallar en los tribunales. Para eso el Seguro de Hogar Total de MAPFRE da cobertura de defensa jurídica ante reclamación de daños. El proceso puede ser largo y costoso, así que lo mejor es estar prevenido por si se da la circunstancia.