Con un uso que en muchas ocasiones es diario, lo normal es que los elementos de cierre de un armario se desgasten y dejen de encajar o cerrar bien.
Sin embargo, no es necesario poner unas puertas nuevas, pies con unos sencillos repuestos tendrás un armario que abrirá y cerrará como el primer día.
Materiales necesarios para cambiar bisagras y cerraduras
- Destornillador plano
- Destornillador de estrella
- Nueva cerradura
- Nueva bisagra
- Tornillos
Cómo poner una cerradura nueva
Normalmente los armarios utilizan cerraduras de falleba, que son las que tienen una llave y unas varillas por dentro que cierran las puertas. Solo necesitamos comprar una cerradura igual que la que queremos cambiar y seguir estos pasos en orden.
Lo primero será aflojar los tornillos que sujetan las varillas. Comenzaremos por la parte superior y después la inferior. Con cuidado de no dañar nada sacaremos las varillas y las colocaremos de tal manera que después sepamos cuál iba arriba y cuál abajo.
Después ya podremos quitar la cerradura. Será suficiente con desatornillarla por la parte de dentro del armario, que es el mecanismo en sí.
Debemos comprobar que la nueva cerradura encaja en los agujeros que ya teníamos. Si no es así, será necesario hacer unos nuevos con el taladro y una broca de la medida justa.
Atornillaremos la nueva cerradura, teniendo cuidado de que quede bien nivelada y recta para que la llave encaje perfectamente. Podemos meter la llave por el otro lado para ayudarnos.
Por último solo nos queda volver a poner las varillas en su sitio, empezando por la de abajo y después la de arriba. Una vez atornillado todo, probaremos que la llave abre y cierra las puertas del armario.
Cambiar las bisagras del armario
Otro mecanismo importante en las puertas de un armario son las bisagras. Estas pueden estropearse o romperse con el paso del tiempo. Cambiar una bisagra es una tarea sencilla, pero si no lo hacemos con cuidado puede llevarnos más tiempo del que pensábamos.
Debemos comprar el mismo modelo de bisagra que queremos cambiar. En este caso es una bisagra de cazoleta, que son las más utilizadas en los muebles ya que quedan invisibles desde fuera. La bisagra está dividida en dos partes, la propia bisagra que se pone en la puerta y el soporte que se atornilla al mueble.
Quitaremos la bisagra vieja con la ayuda de un destornillador y con cuidado de no hacernos daño por si está rota. Comprobaremos si los agujeros encajan con la nueva bisagra o si por el contrario es necesario hacer unos nuevos con el taladro.
En todo momento tenemos que comprobar que la bisagra queda recta y nivelada, si no es así, al finalizar el trabajo nos daremos cuenta de que no funciona como debe.
Atornillaremos la parte del soporte al mueble con los tornillos necesarios y la parte de la bisagra a la puerta del armario.
Una vez bien sujeto, engancharemos los dos sistemas, los ajustaremos y regularemos para que la puerta abra y cierre perfectamente y atornillaremos para acabar con el trabajo.
Cambiar las bisagras o cerraduras de un armario se trata, en definitiva, de un proceso laborioso, pero ni difícil ni caro y que puedes abordar por tus propios medios. Pero recuerda que gracias a un Seguro de Hogar MAPFRE siempre puedes recurrir a profesionales de contrastada solvencia que lo hagan por ti.