Los animales como los humanos también sufren enfermedades cuando alcanzan la tercera edad, dependiendo de la esperanza de vida de cada raza. Lo perros mayores pueden sufrir problemas relacionados con las articulaciones o huesos e incluso problemas de tipo cognitivo como la demencia senil. Si has notado que el comportamiento de tu mascota ha cambiado y no entiendes por qué, es posible que este sufriendo esta enfermedad degenerativa del cerebro. No existe ninguna cura, pero hay tratamientos y procedimientos que pueden ayudar a controlar los síntomas.
Demencia senil en perros
El envejecimiento puede causar alteraciones en el comportamiento de tu perro por lo que si notas algún cambio extraño debes acudir cuanto antes al veterinario para que pueda diagnosticar de dónde procede el problema. Es posible, que debido a que su cerebro está envejeciendo esté teniendo cambios de comportamientos o sea más lento a la hora de aprender cosas nuevas. Otro de los síntomas que puedes observar es que tu perro puede estar más alerta y responda más a los estímulos además de registrar problemas de memoria. Es posible que no todos se manifiesten a la vez o que tu perro solo sufra alguno de ellos.
Los cambios de este tipo irán apareciendo poco a poco en el perro a partir de que este cumpla los 10 años. Estos signos de envejecimiento son normales en las mascotas mayores y se calcula que más del 50 por ciento de los perros que tienen más de 15 años los sufren. Pero en ocasiones, estos problemas se manifiestan de forma muy rápida y el perro empeora día a día, por lo que puede estar padeciendo un síndrome de disfunción cognitiva.
Síndrome de disfunción cognitiva el Alzheimer de los perros
Este síndrome es muy similar al que sufre una persona que padece Alzheimer, el cerebro envejece más rápido de lo normal y provoca que el perro tenga dificultades relacionadas con el aprendizaje. Aunque no existe una cura, es importante aprender a detectarlo para conseguir corregir alguno de los síntomas e intentar frenar el deterioro que está sufriendo el cerebro de tu perro.
Este envejecimiento del cerebro hace que tu perro no se comporte de manera normal y está asociado a una serie de síntomas:
- Alteración del sueño
- Desorientación
- Dificultad para seguir las rutas de paseo
- Falta de apetito
- Falta de deseo de juego
- Falta de memoria
- Falta de respuesta a estímulos
- Incontinencia
- Irritabilidad
- Lentitud para aprender nuevas tareas
- Olvido de las normas de la casa
Para determinar si estos síntomas tienen que ver con el síndrome de disfunción cognitiva, el veterinario deberá de realizar una serie de pruebas para obtener un buen diagnóstico.
Tratamientos de la demencia senil
Aunque ningún tratamiento cura esta enfermedad puedes realizar acciones para que tu perro presente un deterioro menos rápido. Algunos de estos procesos pueden ir acompañados de medicamentos pensados para mejorar algunos de los síntomas que sufre tu mascota y ayudarle así a sobrellevar la enfermedad.
Para mejorar la calidad de vida de tu perro con demencia deberás esforzarte en ofrecerle una mayor estimulación física y mental en la que el ejercicio sea la base. Estos procesos pueden ayudar a frenar el deterioro del cerebro. Así que la mejor opción es que realices rutinas de ejercicio, adiestramiento y juego de forma diaria. En el mercado existen juguetes de perros pensados para estimular la memoria, por lo que serán ideales para él. Debe seguir una dieta equilibrada en los que las vitaminas y antioxidantes sean los protagonistas.
Es importante que una vez diagnosticado sigas las indicaciones de tu veterinario y acudas de manera periódica a su consulta para realizar un seguimiento de los síntomas y la progresión de la enfermedad.
El Seguro de Mascotas MAPFRE, dispone de un servicio de asesoramiento y orientación veterinaria.