Los tubos fluorescentes contienen un polvo muy tóxico que le da esa luz tan característica. Si alguna vez se rompe uno, no lo inhales y si te ha provocado algún corte, acude a urgencias para que te lo curen.

Gracias a sus características (bajo consumo, tipo de luz y mínimo calor que desprenden), el fluorescente es la mejor luz para colocar en aquellos sitios donde la iluminación tiene que ser constante.

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¿Qué herramientas necesitamos?

El primer paso sobre cómo instalar un fluorescente es elegir las herramientas adecuadas:

– Destornillador de estrella.
– Destornillador plano.
– Tijeras.
– Lápiz.
– Metro.
– Taladro percutor.

Empezamos por el soporte

En este ejemplo vamos a instalar una lámpara fluorescente en una bodega con techo de madera y por ello, hemos elegido una lámpara con los tubos al aire y el plafón cerámico, pero en cualquier caso los componentes serán siempre los mismos.

Por detrás del plafón podemos ver las reactancias y los cebadores, uno por cada tubo. Algunas lámparas llevan una sola reactancia y un solo cebador, pero el funcionamiento es idéntico.

Tenemos que buscar el punto de la habitación en el techo que se encuentra más cerca del punto de luz. Colocamos el soporte para marcar con un lápiz los agujeros donde irán los tornillos y comenzamos a taladrar el techo con un taladro percutor con una broca de Widia (de diámetro 6 será suficiente).

Introduciremos los tacos de plástico en los agujeros (si es falso techo tendrán que ser especiales para escayola) y atornillaremos el soporte al techo.

Conectar los cables y poner los tubos fluorescentes

Instalamos la lámpara sin los tubos para evitar que se rompa y pediremos ayuda a otra persona para que la sujete mientras conectamos los cables: hay que atornillar los cables de color a cada una de las fichas.

No olvides que el cable de tierra (amarillo y verde) debe ir conectado a la correspondiente toma de tierra.

Después ya podemos fijar la lámpara al soporte en el techo y montar los tubos. La manera de montarlos es meterlos lateralmente por una ranura que tienen (hay que hacerlo en los 2 porta-tubos a la vez) y una vez insertados, los giraremos suavemente unos 90º (da igual el sentido), momento en el que notaremos un punto en el que se quedan fijos.

Para finalizar con el proceso que explica cómo instalar un fluorescente, ponemos los embellecedores de la lámpara o la tapa de cristal, en función del modelo. Si hemos seguido todos los pasos correctamente, la lámpara debe funcionar sin ninguna anomalía.

LO QUE DEBES SABER…
  • Consumo: la luz que dan los fluorescentes es producida por la ionización de un gas que contienen, por lo que una vez encendidos, el consumo es mínimo.
  • Fluorescente: los tubos fluorescentes necesitan más componentes que una lámpara convencional, además de los tubos, tienen una reactancia y un cebador.
  • Seguridad: para cualquier trabajo eléctrico que realicemos, es muy importante quitar la corriente desde el limitador y asegurarnos de que no hay tensión en la zona.