LO QUE DEBES SABER…
  • ¿Qué es?: una mesa o caja de luz no es más que una superficie plana iluminada desde abajo, con una luz difusa, que nos permitirá ver diapositivas, calcar dibujos o copiar diseños.
  • Ventilación: no uses elementos de iluminación muy potentes sin la correspondiente ventilación, podrías quemar la caja o incluso el cristal acrílico.
  • Conexiones: repasa todas las conexiones eléctricas para asegurarte de que no hay ningún cortocircuito antes de conectar tu caja de luz al enchufe.

 

Suele ser un artículo caro, pero con poco dinero vamos a enseñarte a fabricar, en este caso, una caja de luz casera.

Reciclar una caja de madera

Buscaremos una caja de madera, puede servir una caja de botellas de vino o, si no tenemos, podemos fabricar una con unos paneles. Para fabricarla necesitaremos un panel para la parte trasera y 4 tablas para los laterales. Encolaremos los laterales sobre la trasera y fijaremos también con unos pequeños clavos, aplicando cola entre los mismos para darle más rigidez a la estructura.

Después, necesitaremos una bombilla o luz. Actualmente existen en el mercado multitud de soluciones con lámparas led que serán las más adecuadas, por producir mucho menos calor que las incandescentes o las halógenas. Podemos incluso poner varias tiras de led, con lo que se podrá reducir la altura de nuestra caja de luz.

Acabar la caja de luz

Para la tapa buscaremos un metacrilato translúcido de color blanco, que dejará pasar la luz y además la difuminará sobre su superficie. En los grandes centros comerciales ya tenemos disponibles planchas de metacrilato. Es recomendable un espesor de 4-5 mm para darle mayor rigidez a la superficie iluminada. Con unos pequeños perfiles de aluminio fijaremos el metacrilato a la caja, de esta forma, si necesitamos cambiar la lámpara, nos será más fácil acceder a ella.

La ventaja de fabricar nuestra propia estructura de madera en lugar de aprovechar alguna caja es que podemos hacer la caja de luz del tamaño que necesitemos.

¡Listo! Con pocos materiales, reciclando una caja de madera o incluso fabricándola con unas tablas, tendremos preparada nuestra propia caja de luz, que poco tendrá que envidiar a las que se compran ya hechas.