Esta raza empezó codeándose con la realeza japonesa, pues eran sus fieles compañeros. Además, se les consideraba animales sagrados por tener una enorme relación con el budismo. Por todo esto, durante siglos, el robo o el asesinato de un Chin se castigaban con la pena de muerte. Se trata del primer perro asiático que llegó a Occidente.

Características principales

 Se trata de una raza originaria de china, aunque se dio a conocer en Japón años más tarde y fue extendiéndose a otros lugares del mundo.

Esta raza es muy similar al pekinés, de hecho, tienen un antepasado común. Es un perro de talla pequeña, y aunque no es considerado de miniatura sí toy. Su peso oscila entre los 3 y 6 kg y su altura del suelo a cruz varía en torno a 18 – 25 cm. Los machos siempre son más grandes que las hembras.

Tiene el pelo bastante fino y largo, muy sedoso al tacto. Presenta mayor abundancia en la parte del cuello, orejas, pecho y rabo, en esta última zona el pelo se enrosca sobre el lomo, dando un aspecto refinado y siendo muy característico de esta raza.

Presenta una cara peculiar, con ojos grandes, redondos y muy separados por un hocico corto y las orejas triangulares caídas hacia abajo. Las extremidades son finas y cortas dando un aspecto de perro elegante al caminar o correr.

Carácter

Hablamos de un perro que, si cuidamos y educamos desde pequeño, puede ser un gran miembro en la unidad familiar. Son juguetones y muy inteligentes, por lo que serán de mayores lo que les enseñemos en su etapa de cachorros.

Es un perro familiar y sociable, que se adapta a la perfección a la vida con niños, siempre que desde pequeños se les enseñe y acostumbre a ellos. Si por el contrario, vive con personas mayores o sin hijos, se acostumbrará a vivir más relajado. En cualquier caso, hay que saber que en el periodo de cachorro estos perros son más traviesos y juguetones y habrá que dedicarles más tiempo a juegos, educación, paseos y sobre todo sociabilizarlo con otros perros, niños, etc.

Se les caracteriza por sus sonidos, no llegan a ser ladridos, pero les gusta expresarse a través de ruidos muy particulares, mezcla de gruñido y quejido.

¿Qué cuidados necesitan?

Con unos cuidados sencillos y procurando al perro una vida sana y saludable, el Spaniel japonés o Chin puede tener una esperanza de vida de 12-14 años.

Cuidados básicos

Estos perros no necesitan unos cuidados diferentes a otras razas, pero sí tenemos que tener especial atención con las caídas, como pueden ser bajadas de cama o sofá, o niños pequeños al cogerlos en brazos ya que sus huesos son frágiles y pueden romperse con facilidad.

Estos perros no se les caracteriza por ser grandes deportistas, prefieren estar tranquilos y tumbados o disfrutar de un buen paseo. El ejercicio moderado les vendrá bien para evitar el sobrepeso y tener una vida más saludable.

No soportan bien el calor, por lo que en los meses de verano nunca debe faltarles el agua y zonas de sombra.

Alimentación

La alimentación debe ir enfocada a la edad en cada etapa de la vida y también al tamaño.

Lo ideal es elegir piensos comerciales porque ayudaremos a retrasar la formación de sarro en los dientes, pero debemos tener en cuenta el tamaño de las bolas del pienso, no deben ser muy grandes debido a sus pequeños dientes. Podemos elegir otras dietas, pero lo ideal es mezclar diferentes formas de alimentación.

Si desde que es pequeño le alimentamos con comida casera o extras como pavo, pan… cuando sea mayor nos será más complicado acostumbrarles a las dietas comerciales.

Higiene

Por su largo pelo, debemos intentar acostumbrarle a un cepillado prácticamente a diario, para evitar la formación de nudos, sobre todo detrás de las orejas. Además de dar un aspecto sucio y desaliñado, los nudos nos pueden generar dermatitis y otros problemas de piel.

El baño debe hacerse mensualmente o incluso aguantando un poco más, evitando hacerlo de forma semanal. Debemos también intentar limpiar los dientes con pastas específicas, puesto que son razas que, desde bien joven, empezarán a acumular sarro, evitando así que se puedan caer piezas dentales o la aparición de alguna enfermedad periodontal.

También hay que limpiarles los ojos y los oídos de manera recurrente para evitar las infecciones.

Cuidados sanitarios

Desde que es cachorro hay que dedicarle tiempo y esfuerzo a la visita veterinaria. En ella nos explicarán y resumirán los cuidados básicos de la raza, además de cuándo necesitará vacunaciones y desparasitaciones tanto internas como externas.

De esta manera, nos ayudará a evitar que aparezcan enfermedades y en caso de que aparezcan cogerlas a tiempo y no tener un desenlace fatal.

Estos pequeños Chin, pueden presentar patologías frecuentes de razas pequeñas, como pueden ser:

  • Enfermedades periodontales: sarro, caída de piezas…
  • Problemas articulares como luxación de rótula o problemas de cadera.

También tiene patologías propias de la raza como problemas respiratorios por su hocico achatado, hay que tener cuidado con el ejercicio severo y los golpes de calor.

De forma algo más periódica hay que vigilar sus oídos y el exceso de cera y de pelo en su interior. Los huesos del Chin son muy finos y corren el riesgo de sufrir fracturas, por lo que debemos tener precaución. Y un Seguro para Mascotas MAPFRE es la mejor protección ante ese tipo de eventualidades.