Si bien es cierto que el rough collie tiene por norma general un carácter muy similar al que aparecía en Lassie, la perra que daba nombre a la popular serie, se trata de un perro pastor grande que durante siglos fue el encargado de cuidar a los rebaños. Tanto por su elegante apariencia como por ese talante protector y bondadoso, son un perro familiar por excelencia que, eso sí, precisa de algunas atenciones para estar a gusto, además de la atención veterinaria que debemos procurar a toda mascota.

Un perro hogareño y cariñoso como pocos

En origen, el rough collie tenía las patas y el hocico más cortos; sin embargo, el cruce con setters y borzois consiguió darle un aspecto mucho más estilizado.

Se trata de un perro muy cariñoso, sensible, bueno, juguetón y muy hogareño y familiar, que le encanta estar rodeado de niños. Pero además es un perro muy inteligente que aprende muy rápido, lo que facilita mucho su adiestramiento.

Aunque es un perro hogareño, es mucho más feliz si está en espacios abiertos en los que pueda correr y gastar sus energías.

Uno de los grandes problemas de los rough collie es que tienden a ladrar mucho, por eso desde muy cachorros hay que enseñarles a que no lo hagan.

El cuidado del cabello y la higiene dental del Rough Collie

En cuanto a su preciosa cabellera, será necesario cepillarla al menos un par de veces por semana, con eso será suficiente. Lo mejor para hacerlo es usar un cepillo de cerdas y cepillar tanto en la dirección del pelo como al revés.

Tienen tendencia a perder piezas dentales si no se mantiene una higiene continuada, así que para evitarlo habrá que cepillar sus dientes con frecuencia y darle mordedores para que mantenga una dentadura perfecta.

También suelen padecer problemas oculares y de piel. En algunos casos, los cachorros de menos de un año pueden sufrir displasia de codo.

En definitiva, el rough collie es un animal de compañía extraordinario, además de ser una de las razas más espectaculares estéticamente, pero que nos exige algo más de atención y tiempo que otros perros menos exigentes.