Las ventanas de nuestra casa nos permiten tener luz y ventilación en el interior. Tener unos cristales limpios nos ayudará a que los rayos penetren mejor y las condiciones de visibilidad mejoren considerablemente. En muchas ocasiones, esta tarea suele postergarse ya que la lluvia o la contaminación ensucian rápidamente los cristales. A ello hay que sumar la dificultad que supone la limpieza de los mismos, sobre todo, si vivimos en un piso alto. Hacerlo en el interior o con ventanas que se abren hacia dentro no es tan complicado, pero sí que se plantea un problema cuando queremos limpiar las ventanas por fuera y estas son correderas o fijas. A continuación, te mostramos algunas claves para mantenerlas impolutas.

Limpiar ventanas por fuera

Dependiendo del tipo de ventana, la limpieza será más o menos complicada. En aquellas que dispongan de grandes cristales que cubran una amplia superficie desde el techo al suelo, necesitarás de distintas herramientas para poder abarcar toda la ventana y en otras, deberás desmontarlas para poder limpiarlas correctamente.

Ventanas oscilobatientes

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Este tipo de ventanas son las más sencillas de limpiar por fuera ya que al abrirse hacia el interior te permitirán acceder fácilmente a los cristales. Para las zonas más altas de estas tan solo necesitarás una escalera o un limpiador con pértiga o mango telescópico.

Ventanas correderas

Las ventanas correderas ayudan a ahorrar espacio y por este motivo son algunas de las más utilizadas. Su principal problema es la limpieza ya que es complicado acceder a los cristales exteriores. La solución es desmontarlas, es decir, sacarlas de su carril para limpiarlas fácilmente en el interior de la vivienda. En algunos casos puede ser complicado ya que pueden pesar mucho, ten mucho cuidado al realizar esta operación y sujétalas con fuerza, desencajando en primer lugar la parte inferior. En estos casos, es mejor que cuentes con ayuda ya que puedes hacerte daño por su elevado peso. Una vez limpias, vuelve a colocarlas en el rail encajando la parte superior y luego la inferior.

Ventanas fijas

Las ventanas fijas son las que más problemas plantean ya que es muy complicado acceder a los cristales exteriores. Por suerte, existen distintas herramientas que pueden ayudarnos a mantener los vidrios impolutos.

  • Robot limpiacristales: este dispositivo escanea la superficie de la ventana y es capaz de limpiarla sin dejar rastros. Dispone de un sistema de seguridad que impide que caiga al vacío y será una buena solución para trabajar en altura. Además de limpiar, seca, por lo que el resultado será espectacular en poco tiempo. Dispone de unas almohadillas en las que deberás aplicar el limpia cristales. Una vez colocado en la ventana, el robot realizará todo el trabajo por ti.
  • Limpiador magnético: dispone de dos piezas con almohadillas. En el interior de ellas lleva instalado un imán de manera que cada una se ajusta al cristal por ambos lados. Tan solo deberás aplicar el limpiador en las almohadillas, colocarlos y moverlo para limpiar los cristales.

Cómo limpiar las ventanas

Ya conoces qué accesorios puedes utilizar para limpiar tus ventanas. A continuación, te mostramos cómo puedes conseguir que queden relucientes y sin rastros.

¿Qué producto utilizo?

En el mercado encontrarás multitud de productos diseñados especialmente para la limpieza de cristales. Estos, además de eliminar la suciedad más incrustada, aportan brillo duradero y protegen tus ventanas. Debido a su secado rápido evitan la aparición de marcas. Por otro lado, puedes utilizar algunas soluciones caseras. El vinagre blanco aporta brillo a las superficies de vidrio, así que será tu gran aliado para limpiar las ventanas. Para conseguir un acabado espectacular mezcla una parte de vinagre blanco con tres de agua caliente. Introdúcelo en un espray y pulveriza en tus ventanas, limpia y seca.

Bayeta, esponja, papel…

Elegir el instrumento adecuado para limpiar dependerá de la suciedad de la ventana. Si esta es muy grande, es mejor que utilices una esponja porosa y que seques después con una bayeta de microfibra que no suelte pelusa. Por otro lado, puedes decantarte por el papel, que además de limpiar los cristales, ayuda a su secado. Si no eres muy fan del papel, puedes decantarte por otras opciones:

  • Los filtros de café son muy útiles para limpiar los cristales ya que ayudan a evitar los arañazos y las manchas. Úsalos como bayeta y verás un resultado que nunca habías imaginado.
  • Papel de periódico: puede utilizarse para limpiar los cristales sin rayarlo. Debes usar siempre un diario viejo, ya que en uno nuevo la tinta aún puede estar reciente y provocar manchas. Por otro lado, el papel de periódico ayudará a crear una capa protectora para evitar que la suciedad se acumule.

Limpiar siempre de arriba abajo

A la hora de limpiar realízalo siempre en la misma dirección para evitar reflejos y manchas. Lo ideal es hacerlo de arriba abajo, de esta manera también evitarás que las gotas de agua ensucien la parte que ya habías limpiado. Recuerda que el Seguro de Hogar MAPFRE cuenta con diferentes coberturas, entre otras la de reparaciones y reformas, daños materiales, asistencia en bricolaje o responsabilidad civil.