¿Alguna pieza de metal que tienes en casa se ha oxidado por descuido o por la humedad que hay en el lugar donde se encuentra? Con los trucos que te mostramos a continuación podrás eliminar el óxido y recuperarla para que vuelva a lucir como si fuera nueva.

¿Por qué se oxidan las cosas?

Este problema aparece con mayor frecuencia en los utensilios que están al aire libre, como en el jardín, o en casas antiguas o descuidadas. Es por ejemplo el caso de viviendas de alquiler o de otras que están mucho tiempo deshabitadas. En ellas es muy fácil encontrar objetos que están deteriorados por el óxido.

Para que esto no ocurra, lo principal es prevenir: debemos proteger esos objetos de la lluvia y la humedad, intentando no dejarlo al aire libre y procurando limpiarlos con un trapo después de usarlos.

En el caso de elementos de decoración que inevitablemente tienen que estar al aire libre, es aconsejable aplicar una mano de cromo para evitar que se oxiden con facilidad.

¿Cómo quitar el óxido que ya ha aparecido?

– Puedes introducir el objeto dañado en un vaso de Coca Cola y dejarlo durante varias horas. Cuando lo saques, para que no se quede pegajoso, puedes lavarlo con agua y secarlo completamente.

– Si el objeto tiene poco óxido, la solución es aplicar un poco de quitaesmaltes con un algodón. Tendrás que repetir varias veces esta tarea hasta que desaparezca.

– Otra opción es introducir la pieza en un recipiente con agua y bicarbonato. Tendremos que dejarlo actuar durante unas horas y cuando veamos que el óxido se ha desprendido, pasarle un trapo para terminar de limpiarlo.

– El vinagre también es un buen aliado. Se debe poner a calentar en una cazuela y antes de entrar en ebullición, mojar un trapo (con mucho cuidado para no quemarnos) y limpiar el objeto con él.

Si estos trucos para eliminar el óxido no funcionan, la solución deberá pasar por usar productos desoxidantes. Para tener todos los elementos de tu casa y tu vivienda en general en perfectas condiciones, no lo dudes y contrata un Seguro de Hogar MAPFRE para hacer frente a determinados daños que puedan surgir de forma imprevista.