Cada día se pueden acumular en el colchón miles de ácaros. Los colchones tienen un tejido poroso que permite la transpiración, pero también retienen las partículas de suciedad, que son más difíciles de eliminar a medida que pasa el tiempo.

Pasamos alrededor de un tercio de nuestra vida durmiendo, y no hay nada más importante que elegir un colchón que sea cómodo. Tanto o más importante es mantenerlo limpio día tras día, prolongando su vida útil.

Malos olores, manchas, marcas de roce, acumulación de moho, polvo y ácaros son los principales problemas que pueden aparecer cuando no seguimos una rutina de limpieza del colchón correcta. Descubre cómo limpiar un colchón muy sucio y las mejores técnicas para desinfectarlo de manera natural, usando productos que todos tenemos en casa.

Cómo limpiar y desinfectar un colchón

Los expertos recomiendan que para prolongar al máximo la vida útil de un colchón, se proceda a hacer una desinfección más profunda cada 6 meses. Así evitamos que los ácaros y microorganismos se acumulen en la superficie, evadiendo problemas de salud y enfermedades como alergias y asma.

Aprovecha para rotar el colchón al mismo tiempo.

1. Con bicarbonato

El bicarbonato de sodio es un remedio natural para la limpieza y desinfección de cualquier superficie del hogar. Se puede usar sin problema sobre el colchón, ya que no daña el tejido, pero sí elimina las manchas y consigue acabar con los ácaros, hongos y bacterias.

Mezcla bicarbonato sódico con agua tibia dentro de un bote rociador en spray. Agita bien la mezcla, y ve aplicándola por toda la superficie del colchón. Déjala actuar un par de horas. Para aumentar la efectividad de este producto, puedes cubrir el colchón con un plástico, creando un ambiente más propicio para acabar con los microorganismos.

Si deseas eliminar manchas e incluso malos olores, aplica un poco más de producto sobre la zona a tratar, y frota ligeramente con un cepillo de cerdas suaves. Déjalo actuar y procede a retirar los restos.

Una vez al año puedes, aprovechando la limpieza de primavera, aplicar una capa gruesa de bicarbonato en polvo sobre el colchón, y déjalo actuar durante todo el día al aire libre o en una habitación bien ventilada. Termina por pasar la aspiradora para eliminar los restos que hayan quedado, y el colchón estará totalmente desinfectado.

2. Con amoniaco

Si no has seguido una limpieza periódica y ha llegado el punto en que ha acumulado mucha suciedad prueba a desinfectar con uno de los productos de limpieza imprescindibles en cualquier hogar, el amoniaco.

Este producto es más fuerte, pero muy efectivo para eliminar las manchas difíciles como las de sangre, orina y otras manchas biológicas.

En un bote de spray, mezcla media taza de amoniaco con 2 tazas de agua templada. Utiliza una mascarilla para proteger tu boca y tu nariz mientras aplicas el producto rebajado con agua sobre toda la superficie del colchón. Mantenlo en todo momento en una habitación ventilada o al aire libre para no aspirar el amoniaco.

En caso necesario, moja un paño de algodón con la mezcla anterior, frotando sobre las manchas complicadas. Utiliza guantes para que no entre en contacto con tu piel.

Deja actuar el amoniaco rebajado con agua durante un par de horas. Enjuaga la superficie usando una esponja mojada en agua fría para que no quede ni rastro de amoniaco. Permite que se seque por completo antes de volver a vestir la cama.

3. Con vapor

No hay nada más efectivo para acabar con cualquier tipo de microorganismo que aplicar calor directo. Si además se trata de calor en forma de vapor de agua, logramos desincrustar la suciedad más fácilmente, al mismo tiempo que matamos los ácaros acumulados en el colchón después de meses de uso.

Al igual que ya vimos para la limpieza y desinfección de alfombras, si tienes en casa una Vaporeta, úsala al menos una vez al año para hacer la desinfección del colchón, dejándolo como nuevo.

Comienza pasando la aspiradora por toda la superficie del colchón para retirar todo el polvo y los ácaros. Los restos que hayan podido quedar se retiran a continuación con la aplicación de calor.

Limpia con la vaporeta haciendo movimientos hacia delante y hacia atrás mientras aplicas vapor, centrándote en una zona concreta durante unos minutos. De esta forma, te aseguras que, cada tramo del colchón queda totalmente esterilizado. Repite este proceso en todo el colchón.

Una vez que hayas acabado con todo el colchón, deja que se seque en un sitio ventilado, un mínimo de 8 a 10 horas para que no queden restos de humedad impregnada. Para asegurarte de que está bien seco, aprovecha en primavera o verano cuando hay menos humedad en el ambiente, y a primera hora de la mañana, para que al final del día se haya podido secar.

¿Cada cuánto hay que limpiar y desinfectar un colchón?

La limpieza de un colchón se debe hacer de manera periódica. Solo de esta forma evitamos que se acumule la suciedad.

Lo ideal para evitar la acumulación de ácaros es ventilar la habitación cada día. Antes de hacer la cama, deja las ventanas abiertas unos minutos para que la humedad no se acumule en el tejido. Una vez ventilado, sacude las sábanas y haz la cama de manera habitual.

Hacer la habitación para evitar la acumulación de polvo y cambiar las sábanas como mínimo una vez por semana, nos permite mantener el colchón limpio con muy poco esfuerzo. Aprovecha para pasar la aspiradora por la superficie antes de poner las sábanas limpias. Basta con poner en práctica estos pequeños gestos para una limpieza semanal del colchón, ayudándote de una limpieza y desinfección más profunda cada 3 o 6 meses, según las necesidades de tu hogar.

A pesar de que existen otros muchos trucos para limpiar y desinfectar el colchón, estos 3 son los más sencillos y seguros para poner en práctica en el hogar. Usa productos naturales y hazlo siempre con cuidado, para tener siempre tu colchón limpio sin riesgo a sufrir ningún accidente en el hogar.

¿Y tú, cómo sueles desinfectar un colchón con productos caseros? ¿Conoces otro método tan efectivo como estos?