Las moquetas son un revestimiento para suelos que proporcionan calidez y ofrecen, al mismo tiempo, grandes posibilidades decorativas. Son una solución ideal para cubrir suelos que están en mal estado, hablando desde un punto de vista estético, o son muy antiguos.

Colocar una moqueta no es un trabajo demasiado complicado. Uno mismo, con un poco de habilidad, tiempo y muy pocas herramientas, puede hacerlo y conseguir un resultado satisfactorio.

Explicamos cómo hacerlo en unos sencillos pasos.

Antes de poner la moqueta

  • Lo primero es medir la estancia donde se va a colocar la moqueta para saber qué cantidad hay que comprar. Hay que calcular al menos un 10 por ciento más.
  • Despejar la estancia y quitar todos los elementos que puedan estorbar (puertas, rodapié, jambas, perfiles de transición, etc.) para trabajar con comodidad.
  • Como ocurre con otros tipos de suelo, la colocación de una moqueta nueva requiere una previa preparación del suelo: nivelar el suelo con pasta niveladora si es necesario; la superficie debe estar limpia de polvo, grasas, líquidos, etc.
  • Cuando la superficie del suelo esté lista, extender la moqueta y esperar uno o dos días para dejar que se aclimate a la temperatura de la habitación.

Materiales y herramientas

Los materiales y herramientas que vas a necesitar son los que se especifican en la siguiente tabla:

Materiales

  • Moqueta
  • Adhesivo acrílico para moquetas
  • Adhesivo de montaje
  • Cinta de doble cara para moquetas
  • Rodapié
  • Alcohol

Herramientas

  • Regla metálica
  • Cúter
  • Tijeras
  • Espátula
  • Espátula dentada
  • Metro
  • Lápiz

¿Cómo poner una moqueta?

Fuente: https://bit.ly/35TbG13

Hay dos formas de fijar la moqueta:

Enmoquetar con cinta de doble cara

Si la superficie a cubrir es pequeña, lo más cómodo es usar cinta adhesiva de doble cara. Para ello:

  • Limpia la superficie donde va a ir colocada la cinta adhesiva con un trapo humedecido en alcohol, para que la cinta se adhiera perfectamente al suelo.
  • Coloca por todo el perímetro de la habitación, bien pegado a la pared, las tiras de cinta adhesiva a las que, previamente, habrás quitado el papel protector de la parte inferior. Coloca también algunas cintas adhesivas en el centro y en otras zonas de la habitación.
  • Presenta la moqueta en el suelo, bien centrada, dejando un margen de 10 centímetros en los extremos.
  • Presiona la moqueta en los bordes entre el suelo y la pared y con la ayuda de un cúter y una tijera haz los cortes necesarios para darle forma en las esquinas, ángulos, etc. Alisa cualquier irregularidad en el piso desde el centro hacia los extremos.
  • Cuando esté bien asentada, haz los cortes con un cúter ayudándote de una regla o una espátula para que queden rectos. Para conseguir uniones perfectas entre rollos, solapa un rollo sobre otro unos 3 centímetros y corta los dos a la vez por el centro del solape ayudándote de una regla.
  • Seguidamente, quita el papel protector superior de la cinta adhesiva a medida que vas fijando la moqueta.
  • Asienta la moqueta, desde el centro hacia los extremos, con un taco de madera.
  • Pon el rodapié. Previamente, raspa la pared para retirar los restos de cola, aplica un adhesivo de montaje en el rodapié y coloca en su posición.

Poner la moqueta con adhesivo

Cuando la superficie a enmoquetar es grande, lo más indicado es usar un adhesivo especial para moquetas.

La preparación del suelo, medición, aclimatación, presentación y ajuste de la moqueta es similar a lo expuesto anteriormente. Una vez hecho esto, continúa con los siguientes pasos:

  • Extiende el primer rollo a lo largo de una pared recta dejando 10 centímetros de sobrante que tendrás que cortar después.
  • Continúa extendiendo los demás rollos sin que quede separación entre ellos.
  • Una vez planteada la posición de la moqueta, dobla aproximadamente por la mitad todas las piezas que has extendido.
  • Vierte el adhesivo sobre el suelo y, con una espátula dentada, extiende uniformemente haciendo barridos en abanico de unos 50 centímetros.
  • Ve colocando la moqueta sobre el adhesivo presionando desde el centro hacia los lados con un trapo o rodillo para que no se acumule el adhesivo y evitar que se formen bolsas de aire.
  • A medida que vas poniendo la moqueta, corta con un cúter el sobrante junto a las paredes ayudándote de una regla o espátula.
  • Finalmente, instala el rodapié como se explicó anteriormente (raspa la pared, aplica el adhesivo y coloca el rodapié)

Poner una moqueta no es complicado y, sin embargo, las ventajas que ofrece son muchas, como un menor gasto en calefacción. Si te interesa el ahorro, recuerda que tu Seguro de Hogar MAPFRE te ofrece la protección que necesitas a un precio muy competitivo.