Para evitar pasar frío o calor en cualquiera de las habitaciones de tu hogar, es muy recomendable aislarlas con los materiales más adecuados y sobre todo, siguiendo estos consejos.

Las claves de un buen aislamiento

Podemos optar por varias formas de aislar térmicamente una habitación, aunque podemos afirmar que la más sencilla consiste en colocar una lámina especial de fibra de vidrio y después cubrirla con lamas de madera o pladur.

No olvides que antes de empezar con el proceso para realizar un aislamiento térmico en una habitación, también necesitarás grapadora, clavos, tacos, taladro con diferentes brocas, sierra de calar, martillo y tijeras o cúter para cortar el aislamiento.

¿Cómo aislar térmicamente una habitación?

Para conseguir la temperatura idónea en cualquier estancia, los pasos que debes seguir son:

1. Si tienes zócalo en la pared quítalo, junto con los apliques de los enchufes.

2. Comienza por colocar el aislamiento en uno de los extremos de la pared, asegurándote de tomar bien las medidas.

3. Pon la tira de fibra de vidrio y grápala.

4. Continúa poniendo la segunda tira colocándola un poco por encima de la anterior.

5. Cuando llegues a la parte más alta y más baja de la pared, corta los restos de material que sobren y pasa el cableado por algunas aberturas que tendrás que hacer.

6. Realiza los mismos pasos en el resto de paredes de la habitación.

7. En el caso de las ventanas, puertas e interruptores hay que recortar el material para bordear los marcos.

Después de terminar este proceso, hay que cubrirlo con madera o con pladur. Si te decantas por la primera opción, la tarea será mucho más laboriosa. Aunque en cualquier caso, hay que colocar unos rastreles para dejar un espacio entre el material aislante y el pladur o las lamas. Los colocaremos por todas las paredes, dejando entre un material y otro un espacio de unos 50 centímetros aproximadamente para que pueda circular el aire.

El último paso sobre cómo realizar un aislamiento térmico en una habitación consiste en fijar las planchas de pladur o las lamas con clavos o grapas. Para otras tareas de bricolaje que necesites hacer en casa, sabes que puedes contar con el Seguro de Hogar MAPFRE que te ofrece dos intervenciones al año.