El galgo es una de las razas de perros que más abandonos sufre en nuestro país. Aunque no hay cifras oficiales, si hacemos una media entre las estadísticas facilitadas por las asociaciones de animales y las del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA), sus abandonos se cifran en varios miles al año. Por suerte, las adopciones de estos animales que, históricamente, han sufrido muchos casos de malos tratos, han crecido en los últimos veinte años gracias al trabajo y dedicación de muchas protectoras.
Si tú también te has decidido a adoptar un galgo, hay ciertas particularidades que debes tener en cuenta para ofrecerle un nuevo hogar donde pueda pasar el resto de su vida en paz y armonía. Pero, más allá de estas cuestiones, en esta ocasión vamos a centrarnos en el procedimiento a seguir para adoptar un galgo legalmente.
Cómo adoptar un galgo, paso a paso
Diferentes entidades y ONG (como SOS Galgos o ACUNR) promueven y facilitan la adopción de estos perros. El procedimiento en la mayoría de ellas suele ser el mismo:
Hacer la solicitud
Primero debemos rellenar un formulario de solicitud con nuestros datos personales, así como información de ciertas características de nuestra casa, del resto de miembros de la familia, si hay más mascotas… Todo lo que sirva para cerciorarse de que el animal va a recibir los cuidados esenciales y que tendrá una vida digna en nuestro hogar. Además, esta información ayudará a los profesionales o voluntarios a ofrecernos un galgo con las características más idóneas para nuestro caso.
Superar el periodo de preadopción
Es muy habitual que antes de recibirlo en adopción, tengamos el galgo en acogida temporal. De esta forma puede comprobarse si se adapta bien a su nueva vida o si existe algún problema.
Adopción
En el caso de que todo vaya bien, se hace la adopción definitiva dando de alta el microchip a nuestro nombre.
El proceso de adopción no es gratuito, tiene un precio que puede rondar los 300 euros, y que se destina para cubrir los gastos del microchip, la vacunación, la desparasitación y la esterilización (en los animales en adopción es obligatorio llevarla a cabo).
Documentación legal para adoptar un galgo
Más allá de la información personal que hayamos puesto en nuestra solicitud o de los datos que nos haya requerido la protectora o entidad, la única documentación que se nos exigirá para adoptar un galgo es el DNI, pasaporte o equivalente.
Una vez que hacemos efectiva la adopción del galgo, tendremos que firmar un contrato de adopción, que es un documento legal y vinculante en el que se constatan los acuerdos alcanzados entre las partes en el momento de la adopción. En él deben figurar aspectos como la fecha y lugar de entrega, el certificado de salud del animal, el precio de la adopción, etc., así como las obligaciones que el adoptante se compromete a cumplir. Si se incumple lo pactado en el mismo, al tener validez jurídica, permite a la protectora reclamar.
¿Qué debemos hacer una vez adoptado el galgo?
La adopción de un galgo, como cualquier otra raza de perro, conlleva una serie de obligaciones y requisitos legales:
Cambiar la titularidad del microchip
Aunque muchas de estas entidades entregan el animal con el chip ya implantado e identificado a nombre del adoptante, no hay que olvidar que es responsabilidad del nuevo dueño hacer el cambio de titularidad en el plazo máximo de un mes desde su adquisición (debe hacerse en el registro de animales de compañía de la comunidad autónoma a la que se pertenezca) y tener actualizados los datos.
Inscribirle en el registro censal
Debemos inscribir a nuestro perro en el registro censal de nuestro lugar de residencia, un trámite que se realiza a través del ayuntamiento.
Suscribir un seguro de responsabilidad civil
Por último, recordar que en algunas comunidades autónomas es preciso disponer de un seguro obligatorio para perros, sean de la raza que sean. En cualquier caso, aunque la obligatoriedad no sea unánime, si es aconsejable tenerlo por los daños que pueda causar nuestra mascota a terceros, ya que en tal caso tendríamos que responder por él.
Llevarle al veterinario
Al adoptar un galgo, es aconsejable hacer una visita al veterinario para que nos ponga al corriente de su historial de vacunaciones, pruebas diagnósticas, etc.