Dependiendo del tamaño de nuestro acuario y del número de peces que tengamos es muy importante contar con un filtro para el agua. El funcionamiento de los filtros varía según el que elijamos, pero básicamente, el agua de la pecera entra dentro del propio filtro y lo atraviesa. En algunos casos, en su interior hay una especie de esponja, cuya misión es retener las impurezas grandes.

Otros tienen carbón en lugar de esponjas y hay otros que tienen materiales de cerámica o porosos que permiten el asentamiento de las bacterias.

Lo que tienen todos ellos es una función clara: mantener el agua con un nivel de limpieza adecuado, que esté clara y no turbia y hacer que la vida de los peces no corra peligro en este sentido.

¿Cómo cambiar el filtro del agua?

Hay que tener en cuenta varios factores importantes antes de cambiar el filtro:

  • Todos suelen ir enchufados a la luz, por lo que se deben desenchufar antes de realizar el proceso para evitar sustos.
  • Para limpiarlos se debe intentar usar agua de la misma pecera, pudiendo extraerla mediante vasos o cubiletes. En caso de que el agua esté muy sucia, se puede usar como última opción agua del grifo, pero habría que tener en cuenta que puede poner en peligro la vida de los peces ya que notan mucho el cambio y se pueden eliminar bacterias que resultan beneficiosas para los animales.
  • No debemos usar jabón, ni desinfectantes, solo agua (y la propia de la pecera, a ser posible)

¿Cómo se limpia el acuario?

  1. El primer paso es coger algo de agua de la pecera y ponerla en una cubeta o cubo donde pondremos el filtro.
  2. Desenchufar el filtro y meter la parte de plástico en el cubo, para limpiarlo con el mismo agua de la pecera:
  • Si el filtro tiene esponja, ésta puede o bien lavarse con agua sin cloro o lavarse con el mismo agua de la pecera. Si está muy desgastado o sucio, debe cambiarse por uno del mismo modelo.
  • Si el filtro es de carbón activado, habrá que cargar el filtro con carbón nuevo ya que no puede lavarse este tipo de material.
  • Si se trata de un filtro biológico, tienen unas bolas de cerámica donde se asientan las bacterias beneficiosas. La única manera de lavarlas es limpiarlas con agua del acuario.

La manera de limpiar la carcasa del filtro es desenchufándolo y utilizando un cepillo especialmente diseñado para esta tarea, y aclarándolo e intentando quitar las impurezas. Se debe evitar siempre utilizar jabones o cualquier otro desinfectante.

  1. Una vez limpio el filtro y sus componentes (o cambiados en el caso del carbono activo) se procederá a introducirlo en el acuario cuanto antes para evitar que los peces noten el cambio, sobre todo al eliminar las bacterias.
  2. Se enchufa de nuevo y se mantiene hasta el siguiente cambio.

¿Cada cuánto se limpia un filtro de un acuario?

Por el bien de los peces, es importante no limpiarlo muy a menudo. Si el agua se mantiene limpia, en función del tipo de filtro podremos esperar algo más de tiempo.

  • En los filtros de esponja, lo recomendable es limpiarlos una vez cada 3 o 4 semanas, en función de cómo mantengamos el agua.
  • En los filtros de carbón activo, se cambiará el carbón cada 2 meses Si hay uso de medicamentos, deberá cambiarse al terminar el fármaco para que no queden restos.
  • En los biológicos, podemos aguantar más; se limpiará cuando veamos el agua turbia o que el filtro no funciona bien.

Cualquiera de estos tres tipos de filtros funciona perfectamente siempre y cuando cumplamos con las indicaciones específicas de casa uno. Lo que es evidente es que llevan tiempo y dedicación y no hacerlo de manera correcta implica poner en peligro la vida de los peces.

Siempre que tengamos dudas, antes de hacer algún cambio lo recomendable es consultar con nuestro veterinario o un especialista que sepa sobre el tema para que pueda ayudarnos. Recuerda que MAPFRE cuenta con un seguro de animales exóticos, que incluye servicio de orientación veterinaria y consulta, además de un servicio telefónico para resolver todas tus dudas.