Cada vez es más común oír hablar del petauro del azúcar, esto se debe a que hoy en día, se buscan animales diferentes como mascotas o compañía, pero a su vez, que sean pequeños, pensando de manera equivocada que, al no crecer en exceso, podrán vivir en una jaula para así evitar ensuciar la casa y tenerlo todo más controlado.

En este artículo nos daremos cuenta de la gran equivocación. Los petauros son animales que necesitan muchos cuidados y paciencia.

¿Cómo son?

El petauro es un mamífero pequeño con costumbres nocturnas, que en libertad, le gusta saltar entre las copas de los árboles. Se conocen como “petauros de azúcar” por su preferencia por los alimentos azucarados.

Los machos son un poco más grandes que las hembras. De la punta del hocico a la base de la cola pueden llegar a medir de 15 a 20 cm. Tienen una cola que puede llegar a ser tan larga como su cuerpo y se parecen a las ardillas voladoras.

Pueden llegar a vivir en función de los cuidados que tengan de 15 a 20 años.

¿Cuáles son sus cuidados?

 

Si tenemos pensado hacernos con un animal de este tipo, debemos conocerle bien, valorar si vamos a ser capaces de darle una buena vida y pensar detenidamente, si podremos darle todos los cuidados que necesita:

Un hábitat adecuado

Debemos tener presente que los petauros son animales muy ágiles, que en libertad, saltan por las copas de los árboles, por lo que en casa deberán tener una jaula muy grande o jaula voladera que le permita saltar y estar lo más a gusto posible, por lo que para empezar, son animales que aunque pequeños, requieren de mucho espacio.

Por lo tanto, no pensemos en encerrarlos en jaulas de conejo, cobaya o hurones, ya que no será un espacio suficientemente amplio para esta especie y a la larga surgirán muchos problemas.

Con el fin de que pueda saltar y corretear más allá de una jaula, es bueno intentar acostumbrarle a salir por el resto de la casa, aunque siempre con mil ojos, para que no se coma nada, no se haga daño con algún objeto, o rompa algo sin querer e incluso, es importante vigilar dónde pueda hacer sus necesidades, porque no es fácil acostumbrarle a que las haga siempre dentro de su jaula.

Solos o acompañados

Se recomienda tener por lo menos dos petauros, ya que cuando viven solos pueden tener ansiedad, estrés y dar lugar a problemas en su comportamiento o su alimentación.

Si decidimos tener un macho y una hembra, es importante tener en cuenta que pueden criar hasta 4 veces al año, lo que implica que se puedan multiplicar en poco tiempo.

Alimentación

Son animales omnívoros a los que les gusta especialmente una dieta más exótica (frutas, verduras, insectos, gusanos…) Lo que supone que debemos tener disponibilidad tanto económica como de tiempo para poder darle una buena alimentación y evitar problemas en su desarrollo.

Se desaconsejan los piensos comerciales o comidas preparadas, algo que implica mayor atención por parte de su dueño.

Olor

Presentan dos glándulas para poder marcar el territorio, por lo que, aunque vivan en el interior de una jaula, puede aparecer olor.

Además, es importante que la jaula esté siempre limpia para evitar infecciones por la suciedad acumulada.

No es una tarea sencilla educarles a orinar y defecar en un sitio concreto como hacemos con otras mascotas, por lo que no debemos engañarnos, no se trata de animales limpios que lo hacen todo en la jaula.

Cuidados

Teniendo un espacio amplio, una jaula acorde con la especie, una buena y variada alimentación y cumpliendo con los cuidados adecuados, tener un petauro en casa no debería ser un gran problema. Eso sí, es muy recomendable contar con la ayuda de un veterinario especializado, como los que incluye MAPFRE en su Seguro para Animales Exóticos para que, si surge cualquier contratiempo, podamos resolverlo cuanto antes.

Con toda esta información, ya puedes valorar si el petauro es el animal que estás buscando para compartir tu vida con él. Si estás dispuesto a dejarte llevar por la diversión de estos pequeños granujas, y de asumir que no son nada silenciosos, por lo que pueden hacernos pasar más de una noche en vela, debido a su alta actividad nocturna.

Si lo tienes claro, existen asociaciones de petauros en adopción porque mucha gente tira la toalla en los primeros meses de haberlo adquirido y estarán encantados de formar parte de tu hogar, pero eso sí, hagamos una lista de pros y contras antes de hacernos cargo de uno de ellos, sin perder nunca de vista que un animal no es un juguete y si todo va bien, nos acompañará durante muchos años.