Los suelos de barro, rústicos, cáildos y muy pertinentes para ciertos estilos de casa, no son especialmente delicados. Pero para cuidar suelos de barro hay que tener en cuenta su especial y muy marcada porosidad que hace que absorban con mucha facilidad cualquier elemento líquido como aceite o zumo. Para evitar que una mancha en el suelo de tu hogar se convierta en permanente, te ofrecemos una serie de consejo.

La limpieza de los suelos de barro

Este tipo de suelo es recomendable para exteriores, terrazas, patios y balcones, pero no tanto para lugares de mucho uso o especialmente proclives a la suciedad como cocinas o comedores. Sin embargo, por razones decorativas, son muchos quienes también se decantan por ellos en estas estancias de la casa. Así, ante manchas puntuales del suelo de barro y para un mantenimiento diario, recuerda:

  • Limpiar de forma habitual con agua templada y jabón neutro –poca cantidad-, o especial para este tipo de pavimento que se vende en todos los establecimientos habituales.
  • Si tienes el suelo de barro en exterior una limpieza frecuente con agua a presión, será una forma perfecta para mantenerlo en buen estado.
  • Elegir siempre fregonas o trapos especialmente absorbentes para que el suelo quede lo más rápido y seco posible en el momento.
  • Actualmente existe suelos de barro o terracota previamente tratados que facilitan en mucho su mantenimiento en condiciones perfectas y su limpieza. Aunque son algo más caros que el suelo de barro tradicional.
  • Ante un vertido líquido, lo más importante es actuar de forma inmediata absorbiendo lo más rápidamente posible para evitar que el suelo lo chupe y forme una mancha que será mucho más difícil de borrar.
  • Una solución de agua templada y lejía puede ser efectiva en zonas pequeñas o manchas puntuales que se produzcan en el suelo de barro. Debe aplicarse de forma aislada, solo en la mancha y de forma controlada, secando rápidamente.
  • En el caso de suelos muy estropeados o manchados, que hayan perdido su característico color rojizo, la única solución es recurrir a profesionales que decaparan con maquinaria y material el suelo de barro para limpiarlo en profundidad

En definitiva, cuidar los suelos de barro no es un problema, siempre que se tenga en cuenta la forma más adecuada y cuidadosa para este tipo de material.

En caso de daños irremediables y profundos del suelo de barro que tengas en tu hogar, recurre siempre a tu Seguro de Hogar de MAPFRE que te ofrece la mejor asistencia y cobertura tanto para este tipo de revestimiento como en toda la gama de suelos habituales en las viviendas, como tarimas de madera o cerámicos.