Las corrientes de aire pueden hacer que una puerta se cierre de manera brusca. Esto puede provocar molestias y ruidos innecesarios a los habitantes de la casa, incluso a los vecinos. En el peor de los casos puede desencadenar algún percance, sobre todo si hay niños o mascotas cerca. Para que esto no ocurra están los retenedores para puertas abiertas. ¿Qué son?

Retenedores para puertas abiertas

Se trata de dispositivos que ayudan a mantener las puertas abiertas evitando que estas se cierren de manera brusca ante una corriente de aire o un golpe demasiado fuerte. También existe la opción de que las puertas se cierren de manera automática y suave. En el mercado podrás encontrar multitud de tipos, pero antes de decantarte por alguno de ellos deberás pensar en cuál es la función que deberá cumplir.

Tipos de retenedores

Es importante que elijas el más adecuado para tu puerta, es decir, teniendo en cuenta sus medidas y su peso para que este sea eficaz. Existen principalmente dos variables:

  • Cierre de puerta automático
  • Retenedor de puerta abierta

Pernios con muelle de retorno

Su objetivo es el de asegurar un cierre de la puerta suave y automático. La puerta debe contar con sus propias bisagras para poder soportar correctamente su peso. Este dispositivo se añade de manera adicional y actúa como retenedor en el marco de la puerta. Solo pueden instalarse en puertas abatibles y permiten regular la potencia y velocidad del cierre evitando portazos. Son muy sencillas de instalar ya que puede hacer con un pasador y por medio de una llave Allen.

Bisagras con muelle de retorno

Estas bisagras se colocan como sustitución a las tradicionales. Esto permite que el cierre de la puerta se haga de manera automática y suave. Con ellas podrás graduar la potencia de cierre para adaptarse al peso de la puerta y la velocidad de este. De esta forma evitarás portazos. Se pueden colocar de dos a tres bisagras por puerta, dependiendo de su anchura y peso. Dentro de las bisagras con muelle de retorno existen dos categorías:

  • Bisagras acción simple: están pensadas para ser colocadas en puertas abatibles.
  • Bisagras de doble acción: estas se deben colocar en aquellas puertas que tienen un funcionamiento en ambos sentidos, es decir, en vaivén.

Muelles brazo

Son muy comunes en puertas con un peso muy bajo (menos de 40 kilos). Se instalan de una manera muy sencilla, sin necesidad de hacer rebajes en el marco o en la puerta y deben mantenerse las bisagras originales. Otra de sus particularidades es que tan solo será necesario instalar un dispositivo por puerta, permitiendo una potencia de cierre y velocidad gradual en puertas abatibles.

Cierrapuertas

Si lo que buscas es cerrar las puertas de manera automática y evitar portazos, esta es la mejor opción. Por lo general, este dispositivo permite regular la potencia de cierre y la velocidad. Suele colocarse en las puertas de los portales de las comunidades de vecinos. Son resistentes para todo tipo de puertas, ya que se pueden colocar en aquellas que van desde los 20 a los 120 kilos.

Retenedores

Los retenedores son un freno que tiene como objetivo evitar que la puerta se golpee con el marco, pero no hacen que esta se cierre de manera automática a menos que se ejerza fuerza sobre ella. Para evitar portazos, ralentizan su cierre en el último tramo, por lo que se evitan molestias innecesarias. Estos deben instalarse siempre en la parte superior del marco de la puerta y se pueden utilizar con otros dispositivos en puertas abatibles o de ascensor.

Sujetapuertas

Si lo que quieres es mantener las puertas del interior de tu casa abiertas de manera segura, cómoda y decorativa puedes recurrir a los sujetapuertas. En este post te damos algunas opciones para que puedas elaborarlos tú mismo.

Aunque pongamos retenedores para evitar portazos y en consecuencia algún percance en casa debemos contar con un Seguro de Hogar MAPFRE que permitan solventar rápidamente multitud de daños gracias a sus múltiples coberturas.