¿Qué son las excéntricas exactamente? Has oído hablar de estas pequeñas piezas de fontanería, pero no sabes realmente para qué se utilizan, hoy te lo contamos.

¿Qué son las excéntricas?

Las piezas excéntricas, en términos generales, son piezas adaptadoras que se utilizan para poder colocar o conectar algún elemento que, por cualquier tipo de circunstancia, no se encuentra totalmente centrado en la posición que debería estar.

Sin embargo, en el lenguaje coloquial del mundo de las obras, reformas y fontanería, se le llama “excéntricas” a unas piezas muy concretas que, por supuesto, cumplen con el cometido de absorber estos desplazamientos que comentamos. Se trata de unos pequeños tubos metálicos roscados en ambos extremos y con una pequeña desviación de milímetros entre la entrada y la salida.

Ambas roscas son muy parecidas, pero una es ligeramente de un diámetro inferior a la otra. La rosca del diámetro más pequeño iría colocada en la toma hembra situada ya con anterioridad en la pared (en este encuentro es recomendable incorporar teflón alrededor de la rosca para asegurar su estanqueidad), y la rosca más grande se utiliza para conectar aquello que queríamos unir desde un principio, pero se encuentra ligeramente desplazado.

Precisamente esta misma circunstancia es la que ha marcado este nombre tan particular, ya que la finalidad de la pieza no es más que absorber una pequeña excentricidad entre dos tubos.

Para instalarlas necesitaremos hacer uso de alguna herramienta de fontanería para apretarlas con seguridad más allá de nuestras propias manos.

Usos y utilidades de las excéntricas

Por lo general, las piezas excéntricas son muy utilizadas en las labores de fontanería, sobre todo a la hora de conectar grifos a sus respectivas tomas de agua. En muchas ocasiones, cuando sustituimos los muebles o lavabos del hogar, las nuevas piezas pueden tener otras dimensiones y colocarse ligeramente desplazados de los originales y, por lo tanto, necesitaremos unas excéntricas para conectar adecuadamente el nuevo grifo.

La utilización de estas piezas no es exclusiva de las reformas o sustituciones de grifos y lavabos. También es muy común su uso en la obra nueva ya que es ciertamente complicado hacer coincidir las tomas de agua y la posición de los grifos al 100%. Cada lavabo puede tener unas medidas algo dispares, y normalmente, es muy común tener que recurrir a las excéntricas para poder cerrar completamente la instalación.

Tipos de excéntricas

Como ya hemos comentado, las piezas excéntricas más comunes son los tubos metálicos con roscas a ambos lados y un pequeño desplazamiento entre ambos para conectar elementos de fontanería como grifos de lavabo o de ducha.  Existen una gran cantidad de tamaños, pero la característica principal que las diferencia las unas de otras es la longitud del desplazamiento que solucionan. Podemos encontrarlas de apenas milímetros hasta 3-5 cm.

Pero en realidad, una excéntrica puede ser de cualquier material y tamaño, y no tiene por qué ser para conectar un grifo.

También existen excéntricas para el saneamiento, es decir, para conectar un inodoro a su desagüe. Estas piezas suelen ser de un material plástico, normalmente de PVC y de un diámetro bastante superior, entre 90 y 110 mm. En este tipo de excéntricas son mucho más comunes encontrarnos con tubos flexibles que nos permitan solucionar excentricidades de mayor longitud. Estos tubos están formados por una serie de pliegues del material a modo de acordeón que, aportan flexibilidad para poder realizar uniones más complicadas. Eso sí, necesitaremos más espacio para trabajar.

Por otro lado, los desagües de las bañeras y platos de ducha también gozan de su respectiva pieza excéntrica para conectar el sumidero a la red de saneamiento. En este caso tienen otra geometría, son más planas y suelen ser siempre flexibles y de PVC.

Las piezas de unión excéntricas son muy útiles a la hora de hacer una pequeña reforma en casa, pueden solucionarnos un problema de medidas de una manera muy económica. Pero siempre es aconsejable contar con un Seguro de Hogar MAPFRE que nos proteja.