La pregunta de cómo decorar una fiesta de cumpleaños para nuestros vástagos puede traernos de cabeza. Y quizá hacer que nos tiremos a lo fácil: sí, sabemos que a los niños les encantan sus personajes de la televisión, esos con los que se ríen y hasta de los que aprenden.

Pero la decoración del cumpleaños no tiene por qué girar en torno a ellos. Podemos hacer que su fiesta sea solo suya, sin que ningún dibujo animado le robe protagonismo, y que al final sea igual de divertida o incluso más.

Las claves para decorar un cumpleaños

Este tipo de fiestas “anónimas” permiten personalizar más aún cada uno de los elementos que integremos en la decoración de la misma. Muchos de esos artículos los podemos hacer nosotros mismos. Además, nos dará vía libre para organizar juegos divertidos acorde con la temática escogida.

Porque eso es lo primero que debemos hacer: pensar sobre de qué irá la fiesta. Indios y vaqueros, piratas, hadas y princesas, exploradores del espacio, superhéroes, el mundo marino o el animal… existen infinidad de posibilidades para crear una temática en torno a la que giren tanto la decoración como los juegos que nos inventemos. Todo depende de los gustos de nuestro hijo.

Después, haremos una selección de los tres colores que dominarán la fiesta y que deberán coordinar entre sí. Con estos dos ingredientes, ya podemos montar toda la parafernalia.

Elementos ideales de una fiesta de cumpleaños

Sweet Table

No hay fiesta que se precie que no cuente con una mesa de dulces de lo más pintoresca.
Y un cumpleaños infantil no puede ser menos. No hace falta que sea muy elaborada, pero sí es conveniente seguir ciertas pautas para que sea lo más vistosa posible.

Escoge un mantel bonito con los colores del cumpleaños. Busca objetos que te sirvan para dar al menos dos alturas a la mesa: unas maletitas vintage,  unas cajas forradas con papeles bonitos, unas bandejas de pisos para cupcakes, unas cajas de fruta al revés, etc. Recopila botes y tarros de cristal, cubos de zinc, o bandejas bonitas y colócalo todo creando una composición armoniosa. Reserva el centro de la mesa para la tarta, y rellena los botes y bandejas con chucherías, galletas fondant, popcackes y todos los dulces que veas que pueden encajar.
En la pared, cuelga unas guirnaldas de banderines, pompones de papel y una guirnalda de letras con el nombre del cumpleañero.

Mesa para la merienda

Lo ideal es poner una tabla larga sobre dos caballetes y cubrirla con un mantel de papel. Escoge vasos, platos y servilletas de colores y diseños acordes con toda la decoración. No olvides las pajitas de papel que están tan de moda, y unos cubiertos desechables de madera que puedes decorar con washi tapes.
En el centro de la mesa, incluye algún adorno fácil de hacer pero llamativo. Por ejemplo, puedes hacer unos centros de globos mini. En unos tacos de madera de unos 10 centímetros por cada lado realiza tres agujeros con ayuda de un taladro. Introduce en cada uno de ellos un palito de plástico con un globo de 13 centímetros. Pon varios de estos cubos a lo largo de la mesa.

Zona de juegos

Destina una zona de la casa a los juegos de los niños. Para ello, según la temática escogida, ambienta un rincón e incluye objetos que puedan servirles. Por ejemplo, si escogemos la fiesta india, una buena idea es colocar una tienda tipi con una guirnalda de luces led en su interior. Añade cojines y mantas, unos disfraces sencillos hechos a mano, y ya has creado un punto de partida perfecto para que inicien su aventura.
La clave para acertar con la idea es ponerse en el lugar del niño y dar rienda suelta a la imaginación.

Photocall

El photocall es una opción que da mucho juego en las fiestas infantiles. Los padres podrán resarcirse a gusto haciendo fotos a sus retoños, y los niños se lo pasarán pipa creando atuendos locos y divertidos.
Solo necesitas crear un fondo sobre el que se instalará todo: una cortina de flecos de papel, una pared de globos, o un diseño que vaya a tono con el tema central. A su lado, en una caja de frutas o un baúl de madera meteremos todo aquello que pueda servirles para disfrazarse. Si hemos elegido hacer una fiesta de hadas, podemos hacer unas sencillas faldas de tul (en internet hay un montón de tutoriales), unas varitas mágicas y unas alas de papel.
Caretas, sombreros, capas, antifaces, espadas de madera, gafas de plástico, pelucas… cualquier objeto será perfecto para dar vida a nuestro photocall.

Decoración de la casa

Para dar unidad a toda la fiesta, tendremos que decorar también parte de la casa. Podemos usar guirnaldas, medallones de papel, globos, pompones de papel, bolas de nido de abeja, guirnaldas de luces, jaulas de pájaros, maletitas, y algo que hacíamos mucho de pequeños y que vuelve a estar de moda: las cadenetas de papel.

La piñata

¿Qué sería de una fiesta de cumpleaños sin piñata? Por supuesto que hay que añadir una, pero no hace falta que todo su contenido sean caramelos (ya tienen bastante con la mesa de dulces), se pueden introducir pequeños juguetes que se venden en un pack para estos casos.

Con todo ya preparado, solo queda esperar que lleguen los amigos de tu hijo para que dé comienzo el cumpleaños. Por tu tranquilidad y porque los niños actúan siempre de forma inesperada, no olvides proteger tu casa con el Seguro de Hogar MAPFRE y a disfrutar de la fiesta.