Materiales para hacer cajas de tela

Los materiales que vas a necesitar para forrar con tela son unas cajas de cartón o madera -sirven los dos tipos-, de cualquier tamaño, un lápiz, cola blanca, un pincel ancho o brocha y, por supuesto, una tela resistente en los colores o estampados que más te gusten.

Pasos para forrar la caja

Lo primero que debes hacer es medir los lados de la caja. Es importante hacerlo bien, ya que estas medidas tendrás que dibujarlas con el lápiz en el reverso de la tela -deja en los lados unos centímetros de más-. Corta la tela por el borde marcado. Seguidamente, extiende bien la cola blanca con el pincel por la base de la caja, que será el que pegarás primero.

Recuerda que hay que pegar rápido la tela para evitar que se seque y alisar bien, para que no queden arrugas. De la misma manera, ve pegando todas las caras de la caja y deja por dentro los centímetros que habías cortado de más. Repite la misma operación con la tapa de la caja. Si quieres conseguir un resultado más moderno y original, cubre la tapa de la caja con una tela de diferente color o estampado, e incluso, si te atreves, puedes forrarla con patchworks.

Decoración original con cajas de tela

Además de la funcionalidad de las cajas para ordenar y almacenar en nuestro hogar, las cajas pueden ser también preciosos elementos decorativos. Porque practicidad y buen gusto no están en absoluto reñidos, si sabes ponerle un poquito de imaginación, conseguirás un resultado sensacional. Las cajas de tela quedan muy vistosas pero, además, puedes encontrar un sinfín de propuestas DIY con tus cajas de almacenaje: de fieltro, con botones, patchworks

También puedes poner alguna cajita pequeña encima de un mueble del dormitorio que haga de joyero o utilizarlas en el salón para guardar el mando a distancia, por ejemplo.

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