Caracoles en salsa

Lo primero que habrá que hacer es pelar y picar tanto los ajos como la cebolla, en pedacitos muy pequeños y triturar el tomate.

Añadiremos aproximadamente unas tres cucharadas de aceite de oliva, en una cazuela que pondremos a fuego medio. En el momento en el que el aceite comience a calentarse le añadiremos la cebolla y las hojas de laurel, con sal al gusto.

Mientras se va pochando la cebolla, iremos elaborando el majado. En un mortero añadiremos los ajos, los cacahuetes, el perejil y una pizca de sal, y lo machacaremos todo bien hasta que se quede todo hecho una pasta y lo dejaremos reservado.

Una vez lista la cebolla, le añadiremos las cucharadas de pimentón y prepararemos un sofrito de pocos segundos, para añadir después la harina y el tomate. Moviéndolo todo bien mientras echamos un poco de agua, conseguiremos ir haciendo poco a poco la salsa.

Este será el momento de añadir los caracoles, dándoles un par de vueltas y dejándolos hervir alrededor de un cuarto de hora. Una vez haya pasado el tiempo, si vemos que la salsa está demasiado espesa, podremos añadir un poco más de agua, rectificando con sal, y lo continuaremos moviendo mientas le echamos el picadillo que habíamos preparado en el mortero.

Dejaremos que se haga todo unos 10 minutos más a fuego lento y nuestro caracoles estarán listos para que los disfrutemos.