El barniz es el producto más empleado a la hora de proteger la madera ya sea en interiores como en exteriores. A pesar de ello, podrás utilizar otro tipo de elementos para proteger las superficies de este material frente a las inclemencias del tiempo y a las plagas de insectos y hongos. Uno de estos productos es el lasur. Te contamos qué es, qué tipos existen y cómo se utiliza.

Qué es el lasur

El Lasur es una acabado que se utiliza sobre todo en las maderas empleadas en el exterior. Su principal cometido es el de proteger las superficies de este material frente a las agresiones de insectos y las inclemencias del tiempo.

Este producto está compuesto a partir de resinas elásticas que se disuelven en agua o disolventes especiales para poder penetrar en la madera y protegerla desde dentro. Este acabado mantiene el poro de la madera abierto para que esta se airee y evita que se cree una película exterior aislante. De esta forma se garantiza el equilibrio hídrico ayudando a mantener la humedad natural de la madera.

Sus usos son muy variados y puede emplearse en cualquier tipo de madera y estructuras exteriores fabricadas con este material ya sea mobiliario, suelos, pérgolas o revestimientos de fachadas.

Ventajas

  • Es capaz de repeler el agua y soportar las dilataciones y contracciones de la madera sin cuartearse.
  • Soporta y resiste los cambios bruscos en las condiciones climáticas.
  • Cuenta con propiedades protectoras frente a los rayos UVA.
  • Proporciona un acabado natural a la madera, de manera que esta queda protegida sin presentar una coloración o brillo ajeno a su propia naturaleza.
  • Protege frente a las plagas y ataques de hongos e insectos ya que incorpora productos insecticidas y fungicidas para este fin.
  • El producto puede aplicarse directamente sobre la madera a tratar, por lo que  no es necesario lijar o decapar previamente la superficie. Su degradación se realiza a través de erosión formando polvo que se elimina de manera natural.
  • Reduce el tiempo de mantenimiento ya que tan solo será necesario renovar el producto en un plazo de entre dos y cinco años.

Diferencias con el barniz

Fuente: https://cutt.ly/rEge7Ad

Es posible que te hayas preguntado cuáles son las principales diferencias que existen entre el lasur y el barniz. Lo cierto es que a simple vista pueden parecer iguales o que realizan la misma función. Lo cierto es que, estos productos son distintos y presentan diferencias entre ellos.

  • El barniz cubre la madera creando una capa protectora con un acabado similar al del plástico. Esto hace que la superficie pierda elasticidad al contraerse y expandirse con la temperatura y la humedad ya que los poros se cierran y el material se cuartea.
  • El barniz es recomendable para zonas en las que las condiciones ambientales se mantienen más constantes como puede ser el interior de la vivienda ya que facilita la resistencia de los muebles y su mayor durabilidad.

Tipos de lasur para madera

En el mercado podrás encontrar diferentes tipos de lasur para utilizar en distintas superficies. Los principales tipos son los lasures que tienen una base de disolvente y los que tienen una base de agua.

Lasur al disolvente

Se realizan a base de resinas alquílicas que han sido modificadas y mezcladas con aceite. Aunque son muy utilizadas, su principal inconveniente es que no presentan demasiada protección contra las radiaciones solares y la humedad.

Lasur al agua

Los lasures al agua son más respetuosos con el medio ambiente, por lo que en la actualidad son los más utilizados. Entre sus características destacan que no son inflamables, son menos tóxicos, se secan rápidamente tras su aplicación y no presentan un olor tan agresivo como aquellos en los que se usa disolvente.

Tanto unos como otros pueden presentar distintos acabados y colores. Podrás encontrar lasures con acabado brillante, satinado o mate, además de distintas tonalidades para conseguir teñir la madera si quieres otros resultados.

Mantenimiento del lasur

Como ya hemos señalado, las superficies de madera tratadas con lasur requieren un mantenimiento mucho menor que aquellas en las que se ha aplicado barniz. Para mantenerlo en buenas condiciones a diario tan solo será necesario eliminar la suciedad y el polvo que pueda adherirse a la madera.

Cuando el producto se haya deteriorado (entre dos y cinco años tras su aplicación) renovar la protección es muy sencilla. Será suficiente con aplicar una o dos manos de lasur sobre la superficie deseada sin necesidad de lijar la madera o decaparla.

Aplicación

Para poder realizar la aplicación de este producto sobre superficies de madera deberás fijarte en que esta no esté húmeda. A continuación, en el caso de ser la primera aplicación prepara la madera limpiando las impurezas y restos usando una lija de grano grueso y a continuación otra de grano fino siempre en el sentido de la veta.

En el caso de que la superficie presente grietas utiliza una masa selladora para madera y deja que se seque siguiendo las instrucciones del fabricante. Una vez seco el producto puedes aplicar el resto de tratamientos preventivos como pueden ser insecticidas o fungicidas adicionales para proteger la madera en zonas en las que los ataques de estos agentes sean especialmente dañinos.

A continuación, aplica el lasur usando un brocha o rodillo, dependiendo de la superficie también podrás utilizar una pistola de aire comprimido. Recuerda aplicar el producto siempre en el sentido de la veta de la madera. Es posible que sea necesario aplicar 2 o 3 capas de producto, por lo que debes respetar los tiempos de secado que suelen ser de unas dos horas.

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