¿Sabes cómo pintar huevos de pascua para niños? La tradición de decorar y pintar huevos de Pascua es una costumbre muy arraigada en Estados Unidos, el centro de Europa e Inglaterra, y que cada vez cuenta con más adeptos en nuestro país. Sobre su origen hay muchas teorías. Una de ellas se basa en las creencias cristianas: los católicos que seguían la abstinencia no podían comer carne, pero tampoco huevos o lácteos.
Para mantener los huevos frescos hasta que llegara el Domingo de Pascua, los cubrían con una fina capa de cera líquida y así se conservaban por más tiempo. Hoy día, la Iglesia Católica solo mantiene la abstinencia de carne y el ayuno de días contados, pero la tradición de los huevos decorados se ha mantenido –y mejorado- con el paso del tiempo.
Algunos historiadores sostienen, además, que en la antigua Mesopotamia era frecuente teñir los huevos de color rojo para recordar la sangre de Cristo que fue derramada por todos los hombres en la crucifixión. Pero existe otra teoría más, esa vez de origen pagano, que revela que desde la antigüedad el huevo se ha considerado un símbolo de vida y fertilidad, por lo que fue elegido como el elemento de la naturaleza que debía dar la bienvenida a la primavera, al renacimiento de la fauna y flora, a las nuevas cosechas.
Sea como fuere, lo cierto es que en la actualidad, personas de todo el mundo celebran el Domingo de Pascua decorando huevos y escondiéndolos por la casa para, a través de un juego, ir encontrándolos todos.
Para los niños, es una actividad de lo más apetecible: pinturas, rotuladores, pinceles, purpurina… y un sin fin de materiales para usar a su antojo y crear bonitos diseños en la cáscara de los huevos. Si tú también quieres practicar esta manualidad con tus hijos, te contamos cómo pintar los huevos de Pascua para que sea todo un éxito.
Cómo vaciar un huevo de Pascua
Antes de nada hay que preparar la materia prima. Existen varias opciones: cocer los huevos y después pintarlos con pintura no tóxica, o vaciar el interior. Nosotros vamos a hacer la segunda que, aunque es más delicada, es la única forma de conservar los huevos de forma indefinida.
Para vaciar el huevo sin que se rompa, haz dos agujeros pequeños con ayuda de un alfiler en cada uno de los extremos. Clava el alfiler con pequeños golpes para que la superficie se erosione poco a poco y no se raje.
Para sacar el interior, puedes soplar por un lado para que salga por el otro, o meter un palo de brocheta fino para extraer todo el contenido.
Después, lávalo bien y sécalo con papel de cocina. ¡Ya está preparado para pintarlo!
Cómo pintar huevos de Pascua para niños
Mete un palo de brocheta por uno de los agujeros del huevo y pínchalo en un trozo de corcho para pintarlo sin tocarlo y sin mancharte las manos.
Para la primera capa de color, sumerge el huevo en un recipiente con una mezcla de pintura con el tono elegido, vinagre y agua tibia.prepareFrame(«recomendador_3», 18, document.location.href);
El vinagre hace que la cáscara absorba el agua con colorante y quede perfectamente teñido. Dependiendo del acabado que busques puedes usar varios trucos, por ejemplo, para que el color sea más intenso basta con dejar el huevo sumergido en la mezcla durante más tiempo. O si lo que quieres es darle un aspecto borroso, tan solo hay que añadir unas gotas de aceite vegetal en el recipiente.
Una vez hecho el color de base, se deja secar. Después, con pinturas acrílicas puedes hacer líneas, adornos, puntitos, estrellas, corazones… y todo lo que la imaginación te permita.
Para finalizar, añade todo tipo de elementos para completar la decoración. Por ejemplo, aplica pegamento y espolvorea sobre él purpurina de colores; o pega trozos de hilos o lentejuelas; o decóralos con washi tape y cintas de colores.
Perlas, lentejuelas, hilo de colores… todos los abalorios que imagines los puedes incorporar a tu huevo de Pascua con ayuda de una pistola de encolar.
Hay diseños más complicados que otros, y en algunas ocasiones se pueden usar plantillas de stencil. Pero lo importante es dejar que los niños desarrollen su creatividad y no encuentren límites a la hora de plasmar los dibujos que prefieran.
No siempre hay que pintarlos con acrílicos y pincel. Existe otra variante más limpia y que muchos padres agradecerán, que consiste en trazar dibujos con rotulador permanente directamente sobre la cáscara y después colorear con otros rotuladores.
El fieltro es una buena opción para incorporar añadidos y hacer divertidas figuras de animales. Para que el fieltro se pegue bien al huevo tendrás que usar una pistola de cola caliente.
En Internet encontrarás mil ideas más para crear tus propios huevos de Pascua, aunque más que el resultado, lo realmente interesante de esta actividad es que se puede realizar con todos los integrantes de la familia. Además, el Seguro de Hogar MAPFRE protegerá tu casa y a los tuyos con las mejores coberturas para que tú no tengas que preocuparte de nada.
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