Los mejores quesos por menos de 10 euros
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El queso ocupa el segundo lugar en el consumo de derivados lácteos en España, por detrás de los yogures. Se calcula que en nueve de cada diez hogares se consume queso a diario o varias veces por semana. Es un alimento recomendable que debe incluirse en las etapas de crecimiento para contribuir a la formación de los huesos, y en la edad adulta para favorecer la conservación de la masa ósea.
En los últimos años ha adquirido una mayor valoración tanto para consumo directo como para su utilización en la cocina siguiendo el ejemplo de los grandes cocineros. España, con más de 150 variedades de queso, es uno de los países con mayor pluralidad de tipos de queso del mundo, a lo que ha contribuido decisivamente su diversidad orográfica y climatológica, factores ambos que condicionan el asentamiento y desarrollo de un gran número de razas de ganado ovino, caprino y bovino.
¿Cómo saber si un queso es de calidad?
La clasificación de los quesos se hace basándose en diversos criterios: tipo de leche, grado de maduración, textura, tipo de corteza y calidad.
Con todas estas combinaciones, no resulta nada extraño que obtengamos un ingente volumen de tipos de quesos y calidades.
En España lo habitual es el consumo de queso de cabra, vaca y oveja en sus distintos grados de maduración, y cada uno de ellos presenta unas características muy concretas. En cuanto a la calidad, deberíamos tener en cuenta que un buen queso tradicional es el resultado de una esmerada elaboración; de la utilización de leche de excelente calidad procedente de animales sanos y bien alimentados; y de un control exhaustivo en el proceso de fabricación. Sin embargo, todas estas cosas son difíciles de controlar por el consumidor final que solo ve el producto en el expositor del supermercado y que únicamente puede comprobar –y es muy importante hacerlo– las condiciones en las que se ofrece: bien refrigerado, bien etiquetado, con el envase en buen estado, en lugar higiénico, etc.
Clasificación de los quesos
El queso de vaca es el más consumido en España; el de cabra tiene un sabor más fuerte tirando a ácido; el de oveja es, por norma general, más cremoso y aromático.
En cuanto a su fabricación, encontramos otras categorías: fresco, aquel que no se ha dejado curar, son suaves y muy delicados; azul, caracterizado por su olor fuerte y su color azulado o verde; semicurados, madurados durante dos o tres meses y cubiertos por una capa gruesa de cera para mantener la humedad; y curados, que tienen una maduración de entre cuatro y siete meses.
Mejores quesos por menos de 10 euros
En el mercado podemos encontrar excelentes quesos de cualquiera de estas variedades por menos de 10 euros el kilo. Hay que advertir, sin embargo, que el precio puede variar considerablemente de unos establecimientos a otros y también de si la compra se realiza online o presencialmente en la tienda. A modo de ejemplo –porque la lista podría resultar interminable- citaremos solamente unos cuantos.
- Nardo: Es un queso viejo, de leche de oveja criadas en tierras castellanas, en sus variedades de curado, semicurado y viejo. Es medianamente fuerte, de olor penetrante, poro fino, elaborado por la empresa Quesos Dulcinea en su planta de Pinto.
- Gran Vallesano: Bajo esta denominación, las Industrias Lácteas San Vicente, en el pueblo leonés de Navatejera, elaboran un queso de mezcla, con leche pasteurizada, curado y semicurado, de sabor intenso pero no fuerte, con una maduración de treinta y cinco días, muy adecuado para acompañarlo con un vino joven o rosado. Es el típico queso de mesa y de bocadillo.
- Arzua Ulloa: Es un queso con Denominación de Origen, fabricado en Galicia, con leche fresca de vaca; también se le conoce como queixo do país; tiene corteza limpia, lisa, cerosa y con color amarillento. Es uno de los quesos tradicionales y clásicos de Galicia de mayor producción y consumo.
- Prieto: Es un queso de tetilla elaborado con leche de vaca procedente de explotaciones ganaderas gallegas. Aunque carece de Denominación de Origen su calidad es sobradamente conocida. Tiene aroma muy suave, poco salado y es ideal para tablas de quesos, aperitivos, o como postre acompañado de membrillo.
- Granja de la Luz: Es un queso palentino, elaborado por Quesería Ibérica en Herrera de Pisuerga, siguiendo tradicionales recetas en su fabricación, maduración y afinado, típico de los quesos castellanos. Podemos encontrarlo en sus variedades de curado de oveja y curado o semicurado de mezcla.
- La empresa Forlasa de Villarrobledo en Albacete, nos ofrece un buen precio en dos de sus quesos: el Gran Imperial, elaborado con leche de oveja, de sabor pronunciado y textura firme y compacta, con un año de curación y el conocido Gran Capitán, semicurado, equilibrado, de delicado sabor y textura para el paladar; y de sutil aroma para los que prefieren una menor intensidad.
- El Pastor: Bajo esta denominación encontramos diversos tipos de queso elaborados por Quesos El Pastor en el pueblo zamorano de Santa Cristina de la Polvorosa. El que aquí traemos por su precio es el semicurado, elaborado con leche pasteurizada de vaca, oveja y cabra; color interior blanco marfil; olor y paladar suave con aroma a leche fresca; textura cremosa; ojos pequeños e irregulares. Es un queso de gran consumo, con el cual se pueden elaborar gran cantidad de recetas de cocina.
- Queserías Entrepinares, la empresa vallisoletana, ofrece buen precio en algunas de sus variedades, como curado mezcla y curado viejo.
Como decimos, esta lista no es exhaustiva, podríamos citar muchos más y, sin duda, se nos han quedado en el tintero algunos tan buenos como los reseñados. Entre ellos podríamos citar los que bajo sus propias marcas tienen casi todos los centros comerciales importantes. Disfrutar de un buen queso no está vedado para las economías más modestas. En España tenemos muchos quesos a buen precio y no por eso faltos de calidad.
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