Azúcar en perros, ¿sí o no?
Gema García Quintero
Licenciada en Veterinaria desde 2009 y especializada en pequeños animales, perros, gatos y roedores. Cuenta con su propia clínica veterinaria, donde dan servicio de consulta, pruebas de laboratorio y diagnóstico, hospitalización y cirugía.
En este artículo, se tratarán las dudas sobre si es conveniente darle azúcar a nuestro perro o no. Empezaremos por diferenciar que no es lo mismo dar un trocito de galleta a un perro cada dos semanas o de manera esporádica como premio, que dar una galleta cada tarde “porque pone carita de pena” y tiene que merendar.
La dieta habitual de los perros lleva la cantidad recomendada de glucosa que debería ingerir, si a esto le agregamos algo más, estaremos superando la cantidad recomendada. Su manera de metabolizar la glucosa puede diferir a la nuestra. Sobre todo, se deben evitar los productos de bollería elaborados, que llevan mucho azúcar, y mucho menos dárselos a diario.
Problemas que puede causar el azúcar en nuestra mascota
La ingesta de manera continua de azúcar en un perro puede, a la larga, ocasionar serios problemas. Nuestro can no morirá de manera inmediata por comerse un bizcocho casero entero, por ejemplo, pero si puede provocarle una sintomatología de vómitos, diarreas e incluso una pancreatitis generada porque no puede metabolizar ni la grasa ni el azúcar del bizcocho.
Pero a largo plazo, ese mismo bizcocho, un trocito todos los días puede provocarnos otros problemas:
- Digestivos: podemos encontrar vómitos, diarreas o anorexia dependiendo de la cantidad ingerida. La ingesta de dulce puede provocar gastritis y úlceras en casos severos. En caso de que la ingesta sea de chocolate negro, podemos provocar una intoxicación en el perro, llegando a ser mortal en algunos casos en función de la dosis ingerida.
- Dentales: los perros no pueden cepillarse los dientes. Una ingesta diaria de dulce provocará un depósito de placa bacteriana en los dientes, provocando la aparición de sarro y esto dará lugar a mal alieno, encías inflamadas, e incluso, llega a molestarles al comer.
- Obesidad: Debido al alto contenido calórico, los perros que toman glucosa de manera habitual tendrán tendencia a la obesidad.
Esto no afectará solo a su peso, los perros “gorditos” tienden a sufrir más en sus articulaciones y también su sistema respiratorio y circulatorio.
Un perro que cada día coma 200 calorías más de las que debe, está sobrepasando su requerimiento basal, provocando que su peso suba de manera rápida, habitual en perros que cada día “meriendan” una galleta, un trozo de bizcocho, o de chocolate.
Enfermedades derivadas de la ingesta de azúcar
No debemos olvidar que la obesidad es un factor de riesgo que puede generar una diabetes.
- Pancreatitis: al ingerir gran cantidad de glucosa, el páncreas libera enzimas digestivas para intentar metabolizarla. Si esto ocurre cada día, provocará inflamación en el páncreas dando lugar a una pancreatitis, provocando vómitos, diarreas, anorexia, fiebre… siendo una patología que en ocasiones puede llegar a ser mortal.
- Diabetes: aunque ingiera pequeñas cantidades de glucosa cada día, podemos dar lugar a una diabetes. El páncreas libera insulina que se encarga de introducir glucosa dentro de las células de manera fisiológica.
Si hay exceso de glucosa de manera continua, la insulina no podrá con toda la glucosa, o el páncreas acabará por no generarla de manera suficiente.
La diabetes es una de las enfermedades que oímos en el parque o nos suena de lejos, pero muchos perros que a diario toman dulce, terminarán padeciendola. Además, es una enfermedad que necesitará tratamiento de por vida: la insulina.
¿Es cierto que puede quedarse ciego?
Todos hemos escuchado que el azúcar o el dulce deja ciego a los perros. En realidad, un trozo de dulce de vez en cuando (no diaria, ni semanalmente) no provocará problema alguno en nuestro animal, salvo que sea diabético y no lo sepamos.
Cuando un perro es diabético, el azúcar es su peor enemigo, generando problemas renales por exceso de glucosa y entre otras, afectando al cristalino del perro, provocando ojos blanquecinos (Cataratas).
Llegando al final lo que tenemos que pensar y extrapolar a ellos es ¿qué haríamos nosotros?, ¿es bueno o sano comernos todas las tardes media tarta con el café? ¿o 4 onzas de chocolate cada día?.
Tendremos que hacer una balanza, no le pasará nada por comer un trocito de galleta como premio una vez por semana o un trocito de bollo una vez cada 10 días, pero si se lo damos todos los días, podremos tener complicaciones a corto o largo plazo.
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