Lo primero que tendremos que hacer será proteger la zona del suelo en la que está el radiador, además de la pared. Para hacerlo, habrá que colocar un poco de papel de aluminio o papel de periódico y una toalla.
Limpiar los radiadores correctamente
El siguiente paso será eliminar todo el polvo, las pelusas o la grasa que se hayan ido acumulando. Lo podemos hacer con la aspiradora colocando la boquilla más pequeña.
A continuación, pulverizaremos el radiador con una mezcla de agua, jabón neutro y amoniaco, y dejaremos que actúe unos minutos.
Pasado ese tiempo, pasaremos un cepillo cilíndrico y lo iremos metiendo por los huecos del radiador, mientras vamos aclarando el líquido que habíamos pulverizado antes. Si no tenemos el cepillo cilíndrico, también podemos usar una bayeta enredada en un palo para frotar bien. Para ir aclarándolo, tendremos que seguir pulverizando la zona pero con un espray en el que solo haya agua. Dejaremos que escurra todo bien y, para secarlo, usaremos un secador de pelo.
Quitar el óxido de un radiador
Si tenemos que quitar manchas de óxido, habrá que mojar la zona con un cepillo metálico suave que habremos humedecido previamente con aguarrás, para después pasar un trapo seco.
Aunque las primeras veces tardaremos un poco más de tiempo, si limpiamos los radiadores con regularidad, será mucho más fácil mantenerlos y cada vez nos llevará menos tiempo.
Es importante mantener limpios los radiadores, tanto por dentro como por fuera, para mejorar su funcionamiento y aprovecharlos al máximo.
Si te han parecido interesantes estos consejos de hogar, nuestro boletín de canalHOGAR te da muchos más. ¡Suscríbete ahora!

canalHOGAR
El equipo de redacción de canalHOGAR lleva más de diez años investigando y publicando artículos relacionados con el mundo del hogar, con temáticas como bricolaje, recetas de cocina y limpieza del hogar, entre otras. No te pierdas todos nuestros consejos y guías para hacer de tu casa el hogar con el que siempre has soñado.
Los años de experiencia de MAPFRE en el sector nos avalan como fuente de información veraz y práctica, ayudándote en tus tareas diarias.
A veces no nos damos cuenta de que algunos objetos de la casa, como por ejemplo, los radiadores también necesitan limpiarse de vez en cuando.