La mayoría de las compañías telefónicas ya ofrecen a sus clientes tarifas planas para poder llamar a fijos o móviles sin límites con un precio cerrado. A pesar de ello, debes tener en cuenta que no todas las numeraciones están incluidas dentro de estas tarifas y que existen números denominados de tarificación especial. Te has preguntado si ¿el 902 es de pago? ¿Y el 900? Resolvemos tus dudas.
¿El 902 es un teléfono de pago?
La respuesta es sí. Este prefijo indica que el número al que estás llamando cuenta con una tarificación especial. Dicho de otro modo, las compañías telefónicas los recogen fuera de las tarifas planas que ofrecen a sus clientes porque disponen de un precio que supone un coste adicional para el cliente.
Así, el 902 es un número de tarificación especial en el que el coste íntegro de la llamada lo abona el usuario. El precio de la llamada de cinco minutos a un número 902 puede costar entre 1 y más de 3 euros desde una línea fija, y hasta 3,37 euros desde un móvil, dependiendo del operador y las tarifas especiales que este aplique.
Este tipo de numeraciones son muy utilizadas por empresas en sus servicios de atención al cliente y con ellos pueden llegar a facturar mucho dinero a costa del usuario. A pesar de ello, debes saber que desde la reforma de la Ley General para la Defensa de los Consumidores y Usuarios (LGDCU) en 2020, cualquier compañía de servicios básicos está obligada a ofrecer una alternativa gratuita a sus clientes.
El uso del 902 no está prohibido, pero es obligatorio ofrecer otra numeración gratuita en aquellas compañías que ofrezcan servicios básicos. De no ser así, estas empresas serán sancionadas.
¿Es el 900 un número de tarificación especial?
Los números que empiezan por 900 u 800 están recogidos por las compañías telefónicas como números de tarificación especial, pero a diferencia de lo que ocurría con los 902, éstos son completamente gratuitos. Es decir, son considerados en esta categoría porque llamar a ellos no supone ningún coste para el consumidor. Esto es así, independientemente de si la llamada se realiza desde un teléfono fijo o desde un móvil ya que la empresa que recibe la llamada es la que se hace cargo al completo del precio de la llamada.
Otros números de tarificación especial
Además de los vistos anteriormente, en la actualidad, las compañías telefónicas contemplan otros dos prefijos como de tarificación especial:
- 901: por su parte, las Administraciones Públicas ponen al servicio de los usuarios, teléfonos que también se encuentran clasificados como de tarificación especial: los 901. Estos presentan un coste compartido entre las dos partes el precio dependerá también de la operadora.
- 905: es un número bastante conocido y tienen un coste fijo por llamada, independientemente de su duración. Este coste puede oscilar entre 0,30 € y 1,20 € por llamada, dependiendo del operador y del servicio específico. Este tipo de números se utilizan sobre todo en programas de televisión, concursos…etc. Las compañías que los usan están obligadas a indicar el importe exacto a pagar por el usuario en cualquier parte en la que aparezcan estos números.
Números de tarificación adicional
Con este tipo de números hay que tener un cuidado especial, ya que el coste que representan es muy elevado. La normativa vigente establece que los proveedores de estos servicios deben informar claramente al usuario sobre el coste de la llamada antes de su establecimiento. Así, el coste consta de un precio fijo de establecimiento de llamada que se incrementa atendiendo a la cuarta cifra del teléfono:
-
1: 0,35 €/minuto
-
2 o 3: 0,75 €/minuto
-
4 o 5: 1,00 €/minuto
-
6 o 7: 1,65 €/minuto
-
8 o 9: 3,15 €/minuto
Los números de tarificación adicional se emplean por empresas o particulares para ofrecer servicios. Estos son:
-
803: Servicios para adultos.
-
806: Servicios de entretenimiento.
-
807: Servicios profesionales.
Conocer los importes de llamar a estos números te ahorrará más de una sorpresa al recibir tu factura del teléfono. Recuerda que con el servicio de Defensa Jurídica del Seguro de Hogar MAPFRE podrás realizar reclamaciones por daños y perjuicios.
