Puede que hayas visto ya el efecto en algún lugar y ahora te preguntes cómo pintar las baldosas del suelo de tu baño o cocina, por ejemplo. Lo cierto es que te sorprenderá lo sencillo y accesible que es hacer este trabajo de pintura.
Las tres fases del pintado de baldosas
Para pintar las baldosas, lo primero que tienes que hacer es comprar una pintura adecuada para este fin –para superficies no porosas- . Dependiendo de la calidad, el material y el acabado que presenten tus piezas deberás comprar una pintura u otra apta para este tipo de superficie. Pero en cualquier caso, es fácil de encontrar. Una vez la tengas, debes proceder del siguiente modo:
Paso 1: Revisión, reparación y limpieza.
Antes de empezar a pintar, es muy necesario que revises el estado del pavimento. Cuanto más limpio y liso puedas preparar el conjunto de baldosas para pintarlas, mejor y más duradero será el resultado. Es imprescindible que limpies en profundidad, eliminando restos, así como grasa y suciedad de cualquier tipo. Igualmente si existen desgastes, grietas o pequeños agujeros es mejor repararlos siempre que sea posible, o al menos, prepararlos para recibir la pintura de la mejor forma. Lo fundamental es lograr que la pintura se adhiera completamente a las baldosas.
Paso 2: Pintado de las baldosas
Es importante que tengas claro tanto el color como el posible diseño o combinaciones que vas a hacer con la pintura sobre las baldosas. Puedes pintar solo una parte, combinar claros con oscuros… tú decides, pero ten en cuenta que pasado el tiempo no es posible volver a pintar con un nuevo color, por ejemplo, como harías en una pared normal. En el caso de las baldosas o azulejos no es posible, porque el lijado o rascado es una labor realmente dificultosa.
Paso 3: Secado
Las pinturas especiales para baldosas o superficies no porosas presentan, además, como ventajas adicionales, un secado rápido y no dejan marca ni del rodillo ni de las brochas o pinceles utilizados, por lo que no tendrás que esperar mucho tiempo para poder volver a pisar las baldosas de tu suelo. No obstante, respeta escrupulosamente los tiempos de secado recomendados por el fabricante de la pintura.
Ahora que ya sabes cómo pintar las baldosas del suelo, es más que probable que te atrevas con este sencillo trabajo de bricolaje y le des un aire nuevo a tu baño o cocina, o incluso a tu patio o terraza. Recuerda que tu Seguro de Hogar MAPFRE, cuidará de tu nuevo y renovado suelo igual que el del resto de tu hogar, manteniéndolo seguro y protegido con las coberturas y asistencias precisas.
Ventajas y desventajas de pintar baldosas del suelo
Pintar las baldosas del suelo puede ser una solución rápida y económica para renovar el aspecto de una estancia sin necesidad de hacer obras. Sin embargo, como cualquier reforma, también tiene sus puntos en contra. A continuación, te explicamos los principales pros y contras para que puedas tomar la mejor decisión según tus necesidades.
Ventajas
- Ahorro económico: es una alternativa mucho más barata que cambiar el suelo por completo. No necesitas levantar baldosas ni contratar mano de obra especializada.
- Resultado inmediato: en pocos días puedes transformar por completo el aspecto del suelo, dándole un aire nuevo a la estancia.
- Versatilidad decorativa: existen muchas opciones de color y acabados, por lo que puedes personalizar el suelo a tu gusto, incluso imitando otros materiales como el cemento pulido o la madera.
- Reforma sin escombros: al no requerir obras, evitarás ruidos, polvo y residuos. Ideal si buscas una solución limpia y rápida.
- Solución temporal o decorativa: es perfecta para espacios que quieres renovar de forma provisional o si te gusta cambiar la decoración con frecuencia.
Desventajas
- Durabilidad limitada: aunque existen pinturas especiales para suelos, el paso del tiempo y el uso continuo pueden provocar desgaste, especialmente en zonas de mucho tránsito.
- Requiere mantenimiento: es probable que con el tiempo necesites hacer retoques o volver a aplicar una nueva capa de pintura para mantener el buen aspecto.
- Preparación minuciosa: para un buen resultado, es imprescindible que la superficie esté perfectamente limpia, seca y libre de grasa. También es necesario aplicar imprimación.
- Riesgo de resbalones: algunos acabados pueden resultar más resbaladizos que el material original, por lo que conviene elegir pinturas con acabado antideslizante.
- No apto para todas las superficies: no todas las baldosas responden igual a la pintura. En suelos con mucha humedad o con baldosas muy porosas puede que el resultado no sea el esperado.
