¿Qué son las baldosas hidráulicas? Usos y materiales
José Moreno Ferre
Arquitecto, apasionado del diseño. Desarrolla su actividad profesional a través de su estudio med.arquitectos, del que es cofundador y arquitecto de proyectos. Compagina su actividad principal trabajando como escritor para el periódico Diario de Almería en la columna semanal "La Cuarta Pared", a la vez que colabora con MAPFRE redactando artículos técnicos, constructivos y de diseño.
Las baldosas hidráulicas surgieron a mediados del siglo XIX, existen indicios de que empezaron a fabricarse por primera vez en España, en Barcelona más concretamente, ya que su primera aparición fechada fue en la Exposición Universal de París de 1867, donde una empresa barcelonesa presentó al mundo su gran innovación: unas baldosas que no necesitaban cocción. Su gran distinción respecto a sus competidores, normalmente baldosas cerámicas, era que su proceso de fabricación se centraba en unir todos sus componentes materiales e introducir el pigmento en la baldosa por medio de presión, con la ayuda de una prensa hidráulica.
A lo largo del siglo XX se han utilizado por toda España, Francia y muchos otros países del área del Mar Mediterráneo. Teniendo su mayor exposición en Barcelona, donde grandes diseñadores, influenciados por el movimiento artístico de su época: el Modernismo, empezaron a utilizarlas en sus proyectos, incluso llegaron a diseñar sus propias baldosas jugando libremente con figuras geométricas, normalmente con diseños redondeados.
De qué están hechas
Originalmente estas baldosas se fabricaban con una mezcla compuesta de polvo de mármol blanco, cemento blanco, arena, pigmentos y agua. Toda esta mezcla se colocaba en unos moldes metálicos llamados trepas. Estos tenían unos separadores para independizar cada segmento de la baldosa con un color diferente y así no mezclar pigmentos y obtener un diseño que conjugase muchas formas y colores distintos.
A continuación, se colocaba el molde boca abajo y se comprimía con una prensa hidráulica. Por último, se retiraba del molde, se sumergía en agua durante 24 horas y finalmente se rociaban con agua y se dejaba secar durante 28 días en una cámara húmeda para que el cemento terminase de endurecerse.
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Hoy en día, podemos encontrarnos los diseños y las formas características de las baldosas hidráulicas fabricados con casi cualquier material, desde cemento hasta barro rojo o blanco, sin embargo, pese que a por extensión llamemos “baldosas hidráulicas” a todos estos azulejos, no están compuestos ni se fabrican como se hacía antes, debido a que implica un gran esfuerzo y es complicado industrializar el proceso de fabricación, las originales se fabrican pieza a pieza.
Por lo tanto, podemos encontrar en el mercado una gran variedad de diseños “hidráulicos” en losas porcelánicas de dimensiones grandes que nos permitirán seguir evolucionando en los diseños heredados del siglo pasado.
Diseños, tamaños y formas
Las características más atractivas a simple vista de estas baldosas son sus llamativos diseños, donde a pesar de su escaso tamaño, conjugan una infinidad de formas y colores. En el nacimiento de las baldosas hidráulicas, solamente existían cinco formatos disponibles: 10×10, 15×15, 20×20, 25×25 y 40×40. Que respondían al tamaño de los moldes industrializados con los que se fabricaban.
Realmente el formato más usado ha sido siempre el 20×20, ya que es un tamaño muy cómodo a la hora de la instalación, que facilita y agiliza mucho el trabajo de los instaladores.
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Los diseños han ido evolucionando y complejizándose hasta el día de hoy, pudiendo realizar grandes mosaicos combinando distintos diseños o bien alternando o repitiendo el mismo con distintas orientaciones. Realmente es un material que invita mucho a la creatividad.
Usos y aplicaciones más utilizadas
El uso más extendido de las baldosas hidráulicas es en pavimentos. Durante la década de los 60 y 70, se utilizaron mucho en solados de edificaciones en España. Al no necesitar horno para su cocción, simplificaba mucho las infraestructuras que los fabricantes necesitaban para su cadena de producción.
Sin embargo, hoy en día podemos encontrárnoslas prácticamente en cualquier sitio, desde suelos interiores o exteriores, hasta como revestimientos en baños y cocinas. Gracias a la gran variedad de cerámicas y azulejos hidráulicos que todas las marcas tienen en sus catálogos, las posibilidades de combinación son casi infinitas. Las modas siempre vuelven y las baldosas hidráulicas vuelven a estar de moda.
Pros y contras de las baldosas hidráulicas
Cada casa comercial hace su particular listado de tipos de microcemento que ofrecen a los usuarios y en gran medida van a depender de varios aspectos
Pros
- Son un material muy económico por lo general, ya que se suelen fabricar en formatos pequeños, que favorecen no solo su producción, sino también su cadena de empaquetado y distribución.
- Tienen diseños muy vistosos e interesantes y pueden servir como pieza principal en el diseño de cualquier espacio. Y si te cansas de ellas, siempre puedes pintarlas.
Contras
- Debido a su pequeño formato, las paredes o suelos repletos de baldosas cerámicas tendrán también muchas juntas que suelen ser porosas y atraer la suciedad. Pero siempre puedes optar por algunos trucos para limpiar estas juntas.
- Para cualquier información adicional sobre este tipo de materiales o sobre su instalación, siempre puedes contar con un Seguro de Hogar MAPFRE que tiene grandes profesionales que podrán asesorarte a la perfección.
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