Al hacer yoga, tanto nuestro cuerpo como nuestra mente consiguen un nivel de relajación y fortalecimiento que aumenta a medida que ampliamos nuestros conocimientos sobre esta disciplina. No en vano, esta práctica ancestral está ganando cada vez más adeptos en todo el mundo, que buscan aliviar sus dolores y tensiones, o rebajar su nivel de ansiedad y estrés, poniendo en práctica determinados ejercicios. Así, consiguen calmar la mente, incrementar la energía y levantar el espíritu.

Cuando nos iniciemos en esta disciplina, es recomendable hacerlo bajo la supervisión de un experto que nos guíe en la realización de los ejercicios. Una vez que tengamos las bases, podemos continuar en nuestra casa, incorporando las diferentes posturas a nuestra vida cotidiana y valiéndonos de los propios muebles para ayudarnos en nuestra tarea. Hemos elaborado una lista con los diez muebles de tu casa que pueden serte de más utilidad, pero siempre puedes adaptarlos a tus necesidades.

Alfombra

Esta será tu mejor aliada a la hora de hacer ejercicios de yoga en casa, ya que sobra ella podrás llevar a cabo todas las posturas que desees. Por ejemplo, la del Cuervo, que es una de las más básicas al hacer yoga. Con ella, fortalecerás los brazos y el abdomen. Estando de pie, lleva las palmas de las manos a la alfombra. Flexiona las rodillas y ponte de puntillas. Dobla ligeramente los codos. Levanta los pies del suelo y llévalos hacia los glúteos, manteniendo la mirada ligeramente al frente. Una vez así, haz tres respiraciones profundas.

Mesita de centro del salón

La baja altura de esta mesa te permitirá hacer una variedad de la postura del Perro que te ayudará a aliviar las tensiones acumuladas en la espalda y la ansiedad. Para hacerla, colócate frente a la mesa, inspira y extiende los brazos hacia arriba. Exhala el aire mientras bajas los brazos llevando las manos hacia la mesa sin doblar los codos. Lleva los pies hacia atrás y abre las piernas hasta llegar a más del ancho de las caderas. Haz presión en los pies y dobla las rodillas. La espalda tiene que quedar en posición paralela al suelo. Repite estas posiciones en orden inverso hasta llegar a la postura inicial.

Cama

Con la postura Nuevo Vuelo conseguirás quitar tensiones del cuello, pecho y hombros. Siéntate en la cama y extiende las piernas hacia el lado de la almohada. Baja poco a poco el torso hasta que la cabeza quede colgando de la cama. Estira los brazos por encima en dirección al suelo y relájate. Mantén esta posición durante treinta segundos. Flexiona las rodillas, pon las manos detrás de la cabeza y siéntate.

Estantería

Este mueble será un buen soporte para ayudarte a hacer la postura de la Luna Creciente, con la que conseguirás aliviar los síntomas de dolor y entumecimiento que puedes notar cuando pasas mucho tiempo al día sentado. Sitúate frente a la estantería, coge aire y estira los brazos hacia arriba. Mientras expulsas el aire, ve bajando los brazos y pon las manos en el estante que quede a la altura de tus caderas. Lleva tu pie izquierdo hacia atrás doblando el talón al tiempo que flexionas la rodilla derecha. La cadera debe quedar mirando de frente. Junta los muslos, uno con otro, levanta el pecho y estira el brazo derecho hacia el cielo con la mano abierta y el codo ligeramente doblado. Mantenerse así durante tres respiraciones. Repetir del otro lado.

Silla

Las sillas son muy versátiles, ya que con ellas se pueden efectuar diferentes posiciones, como flexiones laterales, torsiones, etc. En este caso vamos a hacer la postura del Árbol en su versión más sencilla. Siéntate en la silla y mira al frente. Estira la espalda, lleva los omoplatos hacia atrás y estira los brazos hacia arriba. Junta las palmas como si quisieras dar una palmada y trata de llevar los brazos hacia arriba todo lo que puedas.

Sofá

Esta superficie es perfecta para realizar una variación de la postura de la Paloma que nos ayudará a solucionar nuestros problemas de espalda. Ponte frente al sofá, levanta la rodilla derecha y coloca el pie sobre el sofá de manera que la pierna quede en paralelo con el borde. Flexiona el pie derecho acercando el cuerpo al sofá y mantén esta posición durante treinta segundos. Haz lo mismo del otro lado.

Mesa del comedor

Aquí podemos hacer una variación de la postura Cobra con la que eliminaremos la tensión de la parte baja de la espalda. Sitúate frente a la mesa a un paso de distancia. Estira los brazos y coloca las palmas de las manos sobre el borde de la mesa. Suelta aire de forma relajada y acerca la pelvis hacia el borde de la mesa. Coge aire. Sentirás como se estira todo tu cuerpo.

Pouf

Ideal para ayudarte a hacer la postura de la Rueda. Puedes servirte del pouf para iniciar la postura y, desde ahí, subir un poco más para quedar en la postura de puente sin necesidad de apoyarte más que en las palmas de las manos y los pies.

Butaca

Aquí podemos sentarnos con las piernas cruzadas según la posición Sukhasana que da pie a la reflexión y la meditación. Es una de las más fáciles de adoptar, por lo que es perfecta para iniciarse en el mundo del yoga.

Armario

Después de hacer pasado muchas horas sentado frente al ordenador, hay posturas clave que te harán sentir como nuevo y ayudarán a que mejore la circulación de tus piernas. Se trata de la postura Viparita Karani. Túmbate en el suelo boca arriba con las piernas rectas apoyadas en la puerta del armario. Mantente así durante cinco minutos mientras realizas respiraciones relajadas.

Para conseguir los efectos terapéuticos buscados, es recomendable contar con la supervisión de un médico y con la ayuda de un especialista que nos ayude a realizar los ejercicios correctamente y no incurrir en errores que consigan el efecto contrario al deseado. El Seguro de MAPFRE Salud pone a tu disposición un amplio cuadro médico especializado para asesorarte y atenderte ante cualquier dolencia derivada de esta práctica.