Viajar con una tabla de surf es siempre emocionante, puesto que te diriges a un destino que te permitirá coger olas nuevas, pero también puede suponer todo un desafío que requiere cierta planificación y logística para evitar daños en tu equipo y complicaciones durante el trayecto. Entender cómo transportar la tabla de surf correctamente es clave para evitar contratiempos. Además, hay que tener en cuenta que cada medio de transporte tiene sus propias normas y condiciones, por lo que es importante saber qué hacer antes de emprender el viaje.
Además del tamaño, el peso y la forma de la tabla, hay que tener en cuenta las regulaciones de las diferentes compañías de transporte, los requisitos de embalaje y las tarifas adicionales. Por ello, vamos a descubrir algunos tips y consejos a la hora de viajar con una tabla de surf en tren, avión y coche con el objetivo de que tu tabla llegue en perfectas condiciones a destino y lista para las olas.
Viajar en avión con una tabla de surf
Lo primero que debe saber el viajero que quiere transportar una tabla de surf en avión es que esta tiene la consideración de ‘equipaje especial’ y, por tanto, tiene unas condiciones de tamaño y tarifas propias que dependen de cada compañía aérea.
La mayoría de las aerolíneas no se responsabilizan del material transportado y te harán firmar un pliego de descargo de responsabilidad. Por ello, es crucial empaquetar la tabla de surf con gran mimo y cuidado si vas a facturarla como equipaje para viajar en avión.
¿Cómo preparar la tabla de surf para un viaje en avión?
Para guardar las tablas en el coffin y que no sufran ningún daño, deberás seguir estos pasos:
- Preparar la o las tablas: quita las quillas de todas las tablas y lleva algunas más de repuesto, así como las llaves para ajustarlas.
- Embala cada tabla por separado: puedes usar plástico de burbujas, láminas de espuma protectora o toallas.
- Utiliza los complementos de la boarbag: cintas para asegurar las tablas, separadores, fundas internas para quillas y herramientas…
- Evita rellenar la funda con objetos que tengan cantos o esquinas duras, puesto que pueden golpear las tablas y dañarlas.
- Comprueba el peso y el estado de la funda: es importante respetar el límite de peso, si no queremos pagar un extra en el aeropuerto. Además, muchos surfistas han comprobado que cuanto más ligera es, mejor se suele tratar al bulto y hay menos opciones de que pongan objetos pesados encima.
También puedes poner en práctica el truco que utiliza el surfista americano Dane Reynols a la hora de viajar con su tabla de surf en avión. Se trata de meter dentro del coffin una mochila que servirá para acolchar las tablas. Además, te permitirá meter dentro herramientas, quillas y todo lo que tenga cantos duros que puedan golpear las tablas.

¿Qué hacer si mi tabla de surf se daña durante un viaje en avión?
A pesar de haber seguido todos los consejos a la hora de preparar tu tabla de surf para un viaje en avión y haber pagado la tarifa correspondiente como ‘equipaje especial’, cabe la posibilidad de que llegue a destino dañada con algún canto reventado o la quilla partida. Si esto sucede, lo mejor es poner la reclamación cuanto antes.
En este caso, deberás dirigirte al mostrador de facturación de tu compañía aérea, junto con las etiquetas del equipaje y la documentación. Allí debes solicitar un parte de irregularidad de equipaje (PIR) que deberás firmar y guardar hasta que se resuelva el problema. Algunas compañías aéreas te pedirán que rellenes el documento online, mientras que otras te permitirán entregar la reclamación directamente en el mismo aeropuerto.
Viajar en tren con una tabla de surf
Viajar en tren con una tabla de surf puede ser una opción cómoda y económica, pero, desgraciadamente, no todos los trenes permiten el transporte de objetos voluminosos, por lo que conviene consultar las políticas de la empresa ferroviaria con antelación.
En España solamente Renfe acepta como equipaje de mano aquellas tablas de surf que no excedan los 1,20 metros x 0,90.
Si te decides por este medio de transporte es importante llevar la tabla en una funda acolchada para protegerla de golpes. Si el tren cuenta con espacios especiales para artículos grandes (bicicletas, esquís, tablas de surf o palos de golf), intenta llegar pronto para poder guardarla en un buen lugar. Y también resulta interesante viajar en horarios menos concurridos, para evitar molestias a los demás y posibles daños en tu tabla si el tren va muy concurrido.
Viajar en coche con una tabla de surf
El coche es probablemente el medio más seguro para transportar una tabla de surf, ya que podrás controlar las condiciones del viaje y hacer paradas cuando sea necesario. Si la tabla cabe dentro del vehículo (generalmente si viajas en un SUV o una furgoneta), deberás colocarla sobre una superficie plana y asegurarte de que no se mueva durante el trayecto.
Si por sus dimensiones tienes que transportarla en el techo, deberás utilizar un portaequipajes que cuente con soportes específicos para tablas de surf, además de cinchas resistentes con protecciones para evitar dañar la tabla o el coche. Hay que tener en cuenta que no es recomendable utilizar cuerdas elásticas, ya que no ofrecen la sujeción necesaria. Antes de salir, es imprescindible comprobar que la tabla está bien fijada y conviene revisar el amarre en cada parada antes de llegar a destino.
Ahora que ya sabes cómo preparar la tabla de surf para que viaje en coche, tren o avión y llegue a destino intacta es momento de plantearte la contratación de un seguro de viaje. El Seguro de Viajes MAPFRE incluye la cobertura por pérdida de equipaje, que garantiza la indemnización por pérdida definitiva, robo o deterioro exterior del equipaje facturado en vuelo. Cubre, además, los costes por demora, localización y envío de equipajes y efectos personales. Y, como sabemos que una tabla de surf no es un objeto más, se puede ampliar la cobertura de la indemnización por su pérdida definitiva o extravío, así como su destrucción durante el vuelo.