Trucos para aprender a estudiar o enseñar a tus hijos a hacerlo
Blog hogar MAPFRE
El equipo de redacción de MAPFRE lleva más de diez años investigando y publicando artículos relacionados con el mundo del hogar, con temáticas como bricolaje, recetas de cocina y limpieza del hogar, entre otras. No te pierdas todos nuestros consejos y guías para hacer de tu casa el hogar con el que siempre has soñado.
Los años de experiencia de MAPFRE en el sector nos avalan como fuente de información veraz y práctica, ayudándote en tus tareas diarias.
Los primeros años de nuestra vida, los pasamos estudiando. Desde la infancia, aprender a estudiar es una de las herramientas más útiles para los niños, que podrán seguir utilizando a medida que vayan pasando de curso.
Incluso en la edad adulta se puede aprender a estudiar. Si no lo hiciste correctamente cuando estabas en la escuela, nunca es tarde para adoptar las mejores técnicas.
Maneras de estudiar hay tantas como estudiantes y materias hay en el mundo. Hoy vamos a ver aquellos hábitos y técnicas de estudio que mejor funcionan para la mayoría de los estudiantes, sin importar a qué materia o temario lo estemos aplicando. Son muy útiles para niños y adolescentes, pero también para adultos que vuelven a la universidad o que quieren sacarse unas oposiciones.
Si tú también quieres aprender a estudiar o lograr centrar a un niño en sus estudios, toma nota de estos trucos y ponte manos a la obra.
Consejos y trucos para aprender a estudiar
Rutina de estudio
Lo primero que necesitan los niños distraídos para poder concentrarse en sus tareas, es establecer una rutina adecuada. Comenzando por decidir un horario de estudio que habrá que cumplir a diario, y escogiendo un lugar adecuado en el que no haya distracciones.
Busca una habitación en casa que sea tranquila, cómoda y que tenga buena luz para estudiar. Acomoda un escritorio con todo lo necesario para estudiar con hijos o para un adulto estudiante, y elimina cualquier distracción alrededor. Durante el tiempo acordado, el estudiante debe centrarse en sus tareas y sus libros, para ir construyendo una rutina de trabajo poco a poco.
Puede que al principio los niños de primaria necesiten estar controlados por sus padres para que no se distraigan fácilmente a la hora de aprender a estudiar. El esfuerzo merecerá la pena, porque en poco tiempo se acostumbrará, y al final acabará haciéndolo por su cuenta.
Organiza el tiempo de estudio
Para hacer más ameno el tiempo de estudio, combina un rato de concentración máxima con descansos esporádicos. La mejor forma de motivar a un adolescente o de motivarse a uno mismo cuando se es adulto, es prometerse un pequeño premio en cada descanso.
Puedes organizar el tiempo de estudio como mejor te venga. Por ejemplo, hacer un descanso cada 30 minutos de estudio intenso, o descansar cuando logres aprenderte una lección completa.
Pasado este tiempo, haz una pausa de unos minutos en los que disfrutar de alguna motivación como salir fuera a respirar aire fresco, o incluso tomarte un snack antes de seguir estudiando otra tanda más.
Subrayado
Comenzamos con los métodos para estudiar propiamente dichos, con el primer paso que hay que dar para aprenderse la lección. Comenzando por hacer una lectura previa del temario, podemos aprovechar para hacer un subrayado de aquellos puntos que consideremos más importantes.
El subrayado de un texto nos facilita llevar a cabo el resto de técnicas de estudio, y aunque hay muchas formas de estudiar, los expertos siempre coinciden en que siempre hay que comenzar marcando en el texto las palabras y conceptos que son clave.
Apuntes a mano
Siempre que haya tiempo, y si el volumen del temario lo permite, elaborar apuntes a mano es la mejor forma de memorizar.
Consiste en escribir con tus propias palabras todo aquello que debes aprenderte. Además, es uno de los trucos para aprender a estudiar que mejor se adapta cuando en el examen tienes que desarrollar las respuestas en cada una de las preguntas. Hazlo de forma resumida, pero concreta, para asegurarte de que serás capaz de responder en el examen correctamente.
Esquemas y dibujos
Además de los apuntes a mano, o como alternativa a estos, si el temario es muy extenso, los esquemas y dibujos son técnicas gráficas muy útiles para estudiar a cualquier edad. Si tienes una mesa de estudio con la altura adecuada y espacio, no te costará nada realizarlos.
Permiten memorizar conocimientos clave representando tan solo algunas palabras, ideas o frases. Son muy útiles para comprender un tema y poder desarrollarlo a partir de este resumen. Una vez elaborado un buen esquema, podrás repasarlo rápidamente en cualquier minuto, e incluso memorizarlo para hacerlo más extenso durante el examen.
Ver esta publicación en Instagram
Enseñar a los niños a hacer esquemas para estudiar es muy fácil. Destaca los conceptos clave y resúmelos al máximo con unas pocas palabras que sean más fáciles de aprender y retener en la memoria.
Memorización con reglas nemotécnicas
Ahora viene la parte divertida para los niños, y la más práctica para muchos adultos. Las reglas nemotécnicas son una técnica de memorización muy útil para aquellas asignaturas que precisan aprender gran cantidad de datos.
Puedes memorizar palabras utilizando acrónimos, como por ejemplo para estudiar la tabla periódica de los elementos. También puedes aprender gran cantidad de materias haciendo rimas, canciones y con otras técnicas que te permitan memorizar fácilmente.
Repasa la lección con otra persona
Para terminar de afianzar conocimientos, no hay nada como repasar la lección explicándosela a otra persona. Pide a tus hijos que te expliquen todo lo que han estudiado, o si eres tú el estudiante, hazlo a modo de exposición para otra persona o para ti mismo mirándote en el espejo.
Esta es la prueba de fuego para comprobar si has logrado aprenderte los puntos fuertes de la lección. Comprobarás si hay algún detalle importante que aún debas repasar más, y te servirá como descanso para relajarte después de haber estado sentado tanto tiempo frente a los libros.
Compartir estos momentos con otros compañeros de estudio puede ser útil para ambos. Al estudiar en voz alta puedes aprender de tus compañeros algunos conceptos que no tenías claros.
Ejercicios prácticos
No todas las asignaturas ni toda la materia de un mismo temario se estudia memorizando. En ocasiones, es necesario practicar haciendo ejercicios y casos prácticos para poder entender mejor los conceptos abstractos.
Para asignaturas como matemáticas, física, o incluso para los estudiantes de algunas carreras universitarias como derecho, ingeniería o enfermería, es muy útil practicar haciendo modelos de exámenes que contienen ejercicios prácticos para estar preparados para el gran día.
Ya sabes cómo ayudar a un hijo a memorizar el temario para un examen, y cómo estudiar con las mejores técnicas cuando eres adulto. Pon en práctica estas pautas para prepararte para cualquier examen diferente, y optimizarás mejor tu tiempo de estudio centrándote en aquellas partes que son más importantes.
¿Y tú, conoces algunas técnicas para aprender a estudiar que sean efectivas tanto para niños como para adultos? ¿Cuáles son tus trucos favoritos para memorizar antes de un examen?
Comentarios (0)