⌚ 3 minutos | Como sabéis, las cerraduras son el principal sistema de seguridad para impedir que personas ajenas a nuestro hogar o establecimiento entren en él. ¿Sabes qué distintos tipos de ellas hay en el mercado? Pues sigue leyendo:
A la hora de elegir un tipo de cerradura, debemos pensar en su diseño y en su funcionamiento. Para ello es útil saber qué tipos existen en nuestro mercado y qué ventajas ofrecen unas sobre otras.
Clases de cerraduras
Una de las cerraduras más prácticas y que más se utiliza es la cilíndrica. Esta suele instalarse en las puertas de entrada al hogar o en cualquier otra puerta con acceso restringido. Su funcionamiento consiste en introducir la llave por el bombín de pera, también denominado perfil europeo.
Por otra parte, tenemos las cerraduras de sobreponer. Este tipo de cerraduras se caracterizan por su especial instalación. Son colocadas sobre la superficie de la puerta, por lo que quedan al descubierto. Aunque parezca un sistema “moderno”, lo cierto es que crea algo de inseguridad pues son más fáciles de forzar.
También podemos elegir cerraduras de embutir, muy apropiadas para puertas interiores, o las cerraduras tubulares, muy utilizadas para las puertas del baño, pues con ellas se puede cerrar desde el interior con tan solo apretar un botón.
Elementos de seguridad en una cerradura
Independientemente del modelo escogido, existen algunos elementos comunes a las cerraduras que debemos distinguir para saber si contamos con todas las garantías de que un caco tendrá dificultades si quieres hacerla saltar. Y es que por más que con los medios y tiempo adecuados ninguna se resista, una buena cerradura puede ser disuasoria y hacer que el ladrón prefiera dirigirse a otra casa.
Hay varios factores que debemos considerar y un profesional nos puede ayudar a decidir. Pero, para empezar, es preciso que cuente con un buen escudo, que recubre el cerrojo por fuera y dificulta que lo taladren.
También hay que fijarse en el número de pitones, que complica maniobrar con ganzúas. Las buenas cerraduras pueden llegar a tener hasta veinte. Sin embargo, eso también suele influir en el precio: no hay duros a cuatro pesetas y las cerraduras baratas suelen serlo porque también son más sencillas.
Por otro lado, poco hará una buena cerradura en una mala puerta. Recuerda que los buenos marcos, anclajes y otros elementos de seguridad como algunos tipos de cerrojos se complementan con los de la primera.
Y un consejo: si pierdes las llaves o piensas que te las han robado, no vaciles. Cambia de cerradura lo antes posible: hay bandas de profesionales que llegan al extremo de explorar zonas enteras para dar con la puerta que se abre sin resistencia gracias a unas llaves extraviadas.
Cerraduras eléctricas
Si queremos una mayor seguridad, también podemos optar por los sistemas de cierre eléctricos. Estos nos aportan un sistema distinto que otro tipo de cerraduras. Y no solo sirven para nuestro hogar, sino para cualquier espacio que queramos proteger, por ejemplo, una oficina o un establecimiento.
Las cerraduras eléctricas funcionan a través de una serie de códigos de identificación necesarios para entrar. Pueden funcionar mediante una tarjeta, una llave magnética o un panel digital. Este tipo de cerraduras también son muy usuales para garajes, hoteles o acceso a las urbanizaciones.
Por último, aconsejaros que si una buena cerradura no es suficiente para la seguridad total de una casa. Un sistema de alarmas puede ayudarnos a proteger el hogar al máximo.
LO QUE DEBES SABER… |
|
En casa tengo una cerradura cilíndrica y en los baños tubulares. Pero seguro que en poco tiempo las cerraduras eléctricas se imponen en todos los hogares.