Calentar la casa con paneles solares térmicos

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La instalación de paneles solares térmicos en tu hogar es una fuente de beneficios, sobre todo si vives en una zona soleada. Con este sistema podrás ahorrar en la factura de la electricidad, así como hacer uso de una energía 100% ecológica con todas las ventajas para el medio ambiente que ello conlleva.

Si estás dudando, no te lo pienses más y prueba a calentar la casa con paneles solares térmicos. A continuación resolvemos todas tus dudas.

Funcionamiento

• Estos paneles funcionan de una forma muy sencilla: recogen la energía solar y la almacenan para calentar el agua, como suministro eléctrico y para poner en marcha la calefacción. El calor puede llegar incluso a encontrarse entre 40°C y 50°C (en los entornos domésticos casi nunca superará los 60ºC).
• Para garantizar un correcto funcionamiento de estos paneles es recomendable que la instalación corra a cargo de profesionales.
• La capacidad de sustitución de la energía tradicional dependerá de la cantidad de espacio que destines a los paneles. Por ello, suele ser recomendable que si tienes un chalé o una casa baja, uses el techo completo para cubrirlo de paneles y así tener mayor cantidad de sustitución energética.

Ventajas

• La necesidad de recurrir a la energía tradicional es menor con el consiguiente ahorro en la factura eléctrica (dependiendo de su instalación puede llegar a cubrir hasta un 50% del uso de la calefacción).
• Contribuimos a reducir el impacto en el medio ambiente. No sólo se limita el uso de energías que se agotan, sino que reduce también la emisión de gases nocivos.
• El hogar donde se instalen paneles solares térmicos tendrá un mayor valor.
• El coste de la instalación se puede amortizar en un periodo de 2 a 3 años gracias a las anteriores ventajas descritas y, sobre todo, por el ahorro energético.

¿Qué tipos de paneles existen?

Todos los paneles térmicos funcionan con varios tipos de captores de energía. Aquí puedes ver cuáles son para elegir el que más te encaje:

• Funcionamiento con agua: en este tipo de paneles hay un líquido que circula por unos tubos detrás de los paneles y que va recogiendo el calor solar y almacenándolo. Estos pueden ser a su vez solares planos (que tienen forma de caja con cubierta de vidrio), no vidriados (los tubos están hechos de plástico) y solares de vacío (son unos tubos dentro de otros). Este último es el modelo más común.
• Funcionamiento con aire: como su propio nombre indica, en vez de pasar líquido por el sistema, pasa aire que se calienta por la energía del sol.

Para conseguir un ambiente agradable durante los meses de más frío, puedes calentar la casa con paneles solares térmicos eligiendo uno de estos modelos. Recuerda que para disfrutar mucho más de tu casa puedes contratar el Seguro de Hogar MAPFRE que te ofrece una amplia gama de coberturas para hacer frente a una infinidad de desperfectos e imprevistos.