Con el otoño, los primeros atisbos de frío y lluvias entran en escena. Los días se acortan, la luz natural escasea y las rutinas terminan de instaurarse por completo. Es una estación que invita a vivir la casa rodeados del ambiente cálido y confortable que nos brinda el hogar. Pero antes debemos ponerla a punto, y en esto la decoración juega un papel importante. Es el momento de dejar a un lado los colores fríos, los tejidos ligeros y los ambientes frescos para dar paso a todo aquello que escasea en el exterior: luz, calidez y color. Así, crearemos ese refugio en el que cobijarnos del mundo en los meses de frío.
La calidez del rosa
La combinación de azul (índigo, turquesa, navy y marino), verde (lima, oliva, aguamarina o menta) y rosa (cuarzo, bailarina y empolvado) es la apuesta segura de la temporada. Utiliza los tonos cálidos para envolver la habitación y el frío azul para dar algunas pinceladas en adornos, cojines y pequeños detalles.
En la versión más tradicional, los tonos tierra, combinados con naranjas, rojos y apabullantes rosas te ayudarán aumentar la temperatura visual de cada estancia.
Potencia la intensidad de los colores elegidos con ayuda de la luz. Abusa de ella, pero evitando los focos directos y la iluminación plana. Instala pantallas en las lámparas para conseguir ese efecto tamizado y crear rincones íntimos y confortables.
Terciopelo: el must de la temporada
El terciopelo regresa con más fuerza que nunca para invadir cortinas, tapizados, cojines o butacas. Y se convierte en uno de los mejores aliados para crear un ambiente reconfortante en la estación de las hojas secas.
Una de sus cualidades más interesantes es su textura suave, perceptible al tacto pero también a la vista, y ese toque de brillo tan sutil que permite abusar de él sin caer en estridencias. Se trata de un tejido con personalidad, carácter y gran versatilidad a la hora de combinarlo con otros textiles y materiales.
Los más atrevidos pueden optar por cubrir de terciopelo el cabecero de la cama o emplearlo en las cortinas, siempre y cuando la habitación sea amplia y muy luminosa. Para los más discretos: un sencillo tapizado de las sillas del comedor o la elección de cojines de este material son la mejor forma de introducir, poco a poco, el terciopelo en el hogar.
Pero este tipo de tela de tacto velloso no es el único revival del año. El macramé que tanto éxito tuvo en los 70 regresa a nuestras casas en forma de tapiz, mantel, colcha o funda de cojín.
Mantas de punto grueso XXL
Si tu plan perfecto para los días de lluvia es “película-sofá-manta” no debes perderte la prenda estrella que está revolucionando las redes sociales. Se trata de una manta de lana de merino normalmente tejida a mano con puntos XXL, lo que consigue que cumpla a la perfección su función: abrigar mucho. Colócala sobre la cama a modo de plaid. En el salón, déjala a la vista sobre el respaldo del sofá o guardada en un maxi cesto de paja.
Suelos cálidos y abrigados
No hay nada como pisar descalzo un suelo cálido y reconfortante cuando la temperatura exterior está en sus puntos más bajos. Para estos casos, el pavimento de madera es la mejor opción, y si es en tonalidades oscuras mejor, pues visualmente son más calientes.
Los suelos revestidos de tejidos naturales aíslan térmicamente y ayudan a perfilar el diseño decorativo de una estancia. Abriga los suelos jugando con las texturas de las alfombras: yute, lana, algodón, cuero, pelo largo… atrévete a mezclar varios estilos en una misma habitación. En cuanto al diseño: estampados florales, geométricos, étnicos, motivos jacquard, degradados, etc. Bajo los pies impera la libertad total.
Materiales naturales
En los muebles, la madera (sin tratar y mostrando las irregularidades propias de su veta) es la mejor expresión de un hogar cálido con aire otoñal. Incrementa ese poder con el empleo de materiales naturales en los objetos decorativos: cestos de rafia, arpillera o rattan.
Como novedad llegan los bògòlanfinis, unos tejidos de algodón teñidos con barro fermentado que están arribando con fuerza en el diseño de interiores por su gran versatilidad para recrear ambientes étnicos y confortables.
Los olores del otoño
¿Por qué no hacer que el sentido del olfato disfrute también del calor del hogar? Podemos adaptar el aroma de nuestra casa a la nueva estación mediante el uso de ambientadores y velas de canela, vainilla, naranja, o cualquier fragancia que evoque la brisa de los bosques de hoja caduca o las tardes alrededor de la chimenea.
Si necesitas ayuda para acometer la reforma e introducir los cambios para adaptar tu casa al otoño, recuerda que el Seguro de Hogar MAPFRE dispone de un servicio de bricolaje para realizar diferentes trabajos domésticos.
El equipo de redacción de canalHOGAR lleva más de diez años investigando y publicando artículos relacionados con el mundo del hogar, con temáticas como bricolaje, recetas de cocina y limpieza del hogar, entre otras. No te pierdas todos nuestros consejos y guías para hacer de tu casa el hogar con el que siempre has soñado.
Los años de experiencia de MAPFRE en el sector nos avalan como fuente de información veraz y práctica, ayudándote en tus tareas diarias.
Comentarios (0)