Saber cómo decorar tartas te ayudará a ir un paso más allá. No basta con que estén ricas: además, deben ser un espectáculo visual en sí mismas. Y más aún si son para un evento especial, como cumpleaños, baby sower, bautizos, comuniones…

Hay decoraciones caseras muy fáciles de hacer y muy creativas con las que sin duda darás en el clavo. Puedes usar masa fondant, Lacasitos, barritas de chocolate o, lo más top ahora mismo, hacer degradados con buttercream. ¡Echa un ojo a nuestro vídeo para ir cogiendo ideas!

Tarta decorada con Kit-Kat

Usar chocolatinas tipo Kit-Kat a modo de muro de contención es un básico en la decoración de tartas. Y es tan fácil de hacer que hasta pueden encargarse de ello los más pequeños de la casa.

Para pegar las barritas de kit-kat lo más sencillo es cubrir la tarta con algún frosting, cobertura o chocolate fundido e ir poniendo las chocolatinas una al lado de la otra. Ya  montada, hacemos la lazada para que no se muevan.

Otra variante es cubrir la tarta con Lacasitos, con galletas o con lo que nuestra imaginación nos diga.

Tarta fondant

De un tiempo a esta parte, las tartas decoradas con fondant se han convertido en un básico. Aunque poco a poco van cediendo protagonismo a otros estilos, siguen causando esa sensación de espectacularidad.

Es tan sencillo como comprar ya el fondant hecho, lo venden en cualquier supermercado o incluso online y hay cientos de colores para poder elegir. También puedes adquirirlo blanco y añadir colorante. Una vez abierto, es como si fuera un bloque de plastilina que puedes moldear a tu gusto.

Para cubrir una tarta tienes que medir el diámetro de esta, sumarle la altura y añadir 20 cm para tener masa suficiente para el pastel.

Empieza a formar una bola con la masa, para que no se te pegue humedece tus manos en aceite. Con un rodillo aplana la bola hasta crear una especie de base de pizza.

Ajusta el fondant a ojo sobre la tarta, como si fuera un mantel para que no quede corto de un lado y largo de otro. Trabaja con las palmas de la mano y no con los dedos. Y para finalizar y alisarlo utiliza una espátula.

Para decorar puedes hacer figuras, y si no te atreves a dar relieve porque no tienes mucha maña elabora diseños planos, como los de la imagen.

Tarta con frutas frescas

Una tarta muy natural y de vivos colores a la que se puede añadir cualquier fruta: kiwis, manzanas, naranjas, fresas… Solo hay que cubrir la tarta con una capa de nata y sobre ella pegar la fruta cortada en láminas muy finas. Puedes mezclar diferentes frutas para crear diseños muy coloridos.

Tarta decorada con buttercream de colores

La buttercream o crema de mantequilla se utiliza para una gran variedad de decoraciones de tartas. Se elabora, como su nombre indica, batiendo la misma cantidad de mantequilla y azúcar glas, y una pizca de leche.

Para colorearla, solo hay que mojar un palo en colorante alimenticio, introducirlo en la crema y remover con una espátula. Sabiendo esto, ya te puedes hacer una idea de lo sencilla que es la decoración tricolor de esta tarta.

Para cubrir la tarta con buttercream puedes hacerlo de dos maneras: colocando bastante crema en la parte superior y alisarla dejando que caiga por los costados, añadir más masa a los laterales y con una espátula plana ir homogeneizando todo. La otra opción es verter la masa en una manga pastelera y empezar desde abajo hasta la base. Ayúdate con un plato giratorio en ambos casos.

Puedes hacer una capa lisa o una más gruesa y con un palillo o tenedor decorar a tu gusto.

Tarta degradada

La preparación es similar a la anterior, pero en este caso se ha elegido el mismo color en diferentes tonos. Se van colocando franjas desde el color más oscuro hasta el más claro y después se unifican con ayuda de una espátula y un plato giratorio.

Tarta confeti

Para decorar una tarta en poco tiempo, nada mejor que usar sprinkles de colores. Cubre la tarta con nata o buttercream y espolvorea el confeti a tu gusto.

Tarta de animales

Una idea maravillosa y muy creativa es usar figuras de animales de plástico. Píntalos para darles un aire festivo y colócalos sobre la tarta. Además, puedes añadir una mini guirnalda de banderines atada a dos pajitas. ¡Así de simple!

Tarta arcoíris

Una decoración espectacular, sobre todo cuando se cortan las porciones, es la tarta Rainbow.

Cuando tengas hecha la masa de la tarta divídela en 5 partes y coloca cada una en un bol. Añade un colorante a cada porción: amarillo, rojo, verde, azul y morado. Mezcla bien para que la masa quede de color uniforme.

Mientras se hacen en el horno elabora una cobertura de crema con nata y azúcar glasé. Y la dejas enfriar.

Ahora toca montar la tarta: coloca la primera capa de bizcocho, posteriormente la nata montada, otra capa de bizcocho… y así hasta formar un arco iris. Termina cubriendo todo el exterior de la tarta con la crema. Si quieres, puedes añadir un poco de confeti en la base.

Tarta sandcastle

Dentro del amplio abanico de ideas, destaca esta que parece un castillo de arena. ¿Cómo se decora esta tarta? Muy sencillo: necesitas un bizcocho central, que será la torre del homenaje, y otros dos bizcochos más pequeños a modo de almenas. Coloca unos cucuruchos para hacer los tejados.

Cubre los bizcochos con buttercream, machaca galletas y espolvorea con ellas toda la superficie simulando la arena.

Tarta decorada con papel crepé

Esta idea es muy sencilla, pero resultona: solo tienes que verter un cazo de glaseado y dejar que caiga libremente por los lados y añadir una decoración a base de mariposas hechas de papel crepé o cartulina.

El glaseado se elabora removiendo con una espátula una mezcla de 200 g de azúcar glas, una clara de huevo y una cucharada de zumo de limón, y después se deja reposar unos instantes.