Empapelar azulejos de la cocina
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La opción de revestir la cocina con papel pintado es una de las formas más sencillas y económicas para personalizar este espacio y aportar un toque sumamente original. De este modo, no es necesario realizar obras para renovar esta estancia, sino que solo siguiendo algunos consejos es posible disfrutar de una nueva decoración y de otras muchas ventajas.
Los avances introducidos en este tipo de materiales permiten que, hoy en día, empapelar la cocina sea una alternativa viable. Además de su fácil colocación, es muy útil para cubrir posibles imperfecciones que haya en la pared, y, además, se puede quitar y cambiar siempre que sea necesario y permite crear diferentes ambientes en un mismo espacio.
Pasos para poner papel pintado en la cocina
Dado que lo más probable es que las paredes de la cocina estén alicatadas, se debe tener en cuenta que pegar el papel pintado sobre los azulejos presenta algunas dificultades. Por lo tanto, es recomendable seguir las siguientes recomendaciones:
- Para que las juntas y los desperfectos que haya en las baldosas no se noten a través del papel, primero se deben tapar los agujeros y las grietas, así como alisar la superficie.
- En segundo lugar, hay que recordar que las paredes de azulejos no son porosas, por lo que el papel pintado no quedará bien fijado. Para conseguir un buen resultado, es imprescindible aplicar previamente una masilla especial para superficies alicatadas. Este producto cumple una doble función: por un lado, sirve para tapar las juntas y, por otro, deja la pared preparada para añadir la cola y empapelar la cocina.
- La masilla se debe colocar en dos capas. Después de haber extendido bien la primera y esperar que se seque por completo, hay que pasar una lija de grano fino para alisar la pared.
- El siguiente paso es limpiar el polvo que se haya originado y después, aplicar una segunda capa de masilla muy fina. Así se consigue una pared similar a otra que haya sido enlucida con yeso.
- Cuando no quede ninguna rugosidad ni ningún rastro de los azulejos por debajo, ya se puede fijar el papel pintado en la cocina.
Tipos de papel pintado para la cocina
A la hora de empapelar la cocina, es muy importante elegir un papel pintado adecuado. En este sentido se deben valorar algunos aspectos, como por ejemplo su resistencia al uso diario y que sea fácil de limpiar. Algunos de los tipos más utilizados son el papel vinílico, el papel tradicional, el papel con base textil y el papel que mezcla tejido y vinilo.
Sin duda, el más recomendable para una zona con mucho movimiento y donde se genera bastante suciedad y humo es el papel pintado de cocina vinílico. Este material está formado por una base de papel y una capa de vinilo que actúa como impermeabilizante. Esto permite que se pueda limpiar fácilmente, pasando solo un trapo húmedo, y que aguante de forma estoica todo el ajetreo de una cocina.
Es aconsejable elegir un papel pintado vinílico de alto gramaje para que resista mejor a la humedad. No obstante, se debe evitar empapelar las zonas de la cocina que estén más cercanas a la zona de cocción y al fregadero, donde se acumula una mayor cantidad de grasa y de vaho.
Para esta y otras tareas, es posible contar con el servicio de bricolaje del Seguro de Hogar MAPFRE, que se encarga de realizar un amplio abanico de trabajos. Entre ellos se encuentran la colocación de accesorios de cocina, la sustitución de grifos, la instalación de estores, el montaje de muebles kit, etc.
Yo siempre recomiendo poner algún toque de color a la cocina, ya que la gente tiende a poner colores claros y poco vistosos. Los papeles pintados son una buena opción para darle vida.