Macetas con autorriego

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Con las macetas con autorriego podrás olvidarte de regar tus plantas entre una semana y diez días, según la temperatura ambiente. ¡Veamos su funcionamiento!

Macetas con autorriego para tus plantas

Seguramente, te preguntarás cómo es posible que unas simples macetas puedan mantener las plantas húmedas durante tanto tiempo. Pues bien, se debe a su sistema de autorriego.

Estas macetas están compuestas por dos contenedores: la parte superior en la que se introduce la planta, y la zona inferior de la maceta en la que se acumula el agua.

En esta parte inferior, o depósito de agua, se encuentran una especie de mechas que salen de la parte superior de la maceta y que conectan directamente con el sustrato de la planta. De esta forma, las raíces absorben el agua del depósito a través de estas mechas cuando van necesitando humedad.

Además, las macetas con autorriego cuentan con un chivato que indica la cantidad de agua de la que dispone el depósito. ¿Cómo funciona? En el interior de este chivato hay una especie de boya pequeña que sube a medida que echamos agua. Así, sabremos si el depósito está lleno o, por el contrario, si la boya está en el mínimo, es que habrá que rellenarlo de nuevo.

Cuida tus plantas con las hidrojardineras

Sin duda, las macetas con autorriego son una magnífica opción cuando no se dispone de tiempo para regar las plantas regularmente. Incluso, si queremos irnos de vacaciones, podremos hacerlo sin preocuparnos por ellas.

Como has visto, su funcionamiento es bastante sencillo y, además, este tipo de macetas son fáciles de mantener, tan solo hay que comprobar que siempre haya agua en el depósito.

En cualquier centro de jardinería podrás encontrar macetas con autorriego. Existen de diferentes colores y formas (rectangulares, circulares, cuadradas, etc.) para que puedas elegir el diseño que más te guste acorde con la decoración de tu hogar.  En cuanto a los precios de las macetas con autorriego, dependerán del tamaño y modelo de la maceta que elijas.